«No nos sirve decir que dicha comisión es favorecer a la derecha, no señor, es para favorecer la investigación, aclarar lo sucedido y, sobre todo, por respeto a los fallecidos y sus familias»

La agrupación local de Izquierda Unida (IU-IX) en Ribera de Arriba ha dirigido una carta abierta al coordinador autonómico de la formación, Ovidio Zapico, en la que expresa su «malestar» por la decisión de no apoyar la creación de una comisión parlamentaria de investigación sobre el accidente ocurrido en la mina de Cerredo (Degaña), que el pasado 31 de marzo se saldó con cinco trabajadores fallecidos y cuatro heridos. En la misiva, los representantes locales instan a Zapico a «rectificar públicamente» su postura, recordando que IU «siempre ha estado del lado de los trabajadores, más aún en Asturias, de los mineros», y consideran incomprensible que la dirección regional «no exija dicha comisión». Subrayan que el objetivo no es político sino de justicia: «No nos sirve decir que dicha comisión es favorecer a la derecha, no señor, es para favorecer la investigación, aclarar lo sucedido y, sobre todo, por respeto a los fallecidos y sus familias».
La agrupación defiende que, ante la gravedad de los hechos, es fundamental «hacer valer nuestras siglas» y no actuar como “fieles sirvientes del equipo de gobierno socialista”. “Es mejor estar fuera, pero con la cabeza bien alta y mirando a los ojos a los nuestros. No les defraudemos”. La posición de IU Ribera de Arriba se suma a la de otros sectores internos, como la agrupación de IU en Degaña, que también ha mostrado su respaldo a la comisión parlamentaria. En un comunicado, han reconocido su rechazo al uso partidista de la tragedia, pero consideran que «la Junta es el lugar para dar todas las explicaciones necesarias y dirimir las responsabilidades». Según expresan, la ciudadanía tiene derecho a saber «quiénes gestionaban los permisos y eran conocedores responsables de las actuaciones administrativas que no se cumplieron».
En la carta, también se insinúan posibles conflictos de interés en torno a la gestión política del accidente, al señalar que «parece ser que el hermano de la señora exconsejera tenía algún tipo de vinculación con empresas mineras», y que por tanto «más necesaria es esa comisión de investigación donde se depuren todo tipo de responsabilidades».
División en IU pero también en el resto de la izquierda asturiana
La solicitud de una comisión parlamentaria de investigación ha sido presentada en la Junta General del Principado por los diputados del Partido Popular, junto con Foro Asturias. A esta iniciativa se ha sumado la diputada del Grupo Mixto Covadonga Tomé, quien este lunes ha reafirmado públicamente su apoyo. En rueda de prensa, Tomé ha calificado la propuesta como un «ejercicio de transparencia», añadiendo que “quedan muchísimas preguntas por responder” y que la reciente dimisión de la consejera de Transición Ecológica, Belarmina Díaz, “no parece suficiente para la sociedad asturiana”. Por su parte, Ovidio Zapico ha reiterado su rechazo a la comisión, argumentando que su utilidad ha quedado superada tras la dimisión de Díaz, que representa —en palabras del coordinador— “un nuevo escenario que abre paso a la regeneración sin erosión al Gobierno autonómico”. En declaraciones recientes, Zapico advirtió del riesgo de que la comisión “se convierta en una herramienta de la derecha para desgastar al Ejecutivo” y defendió que ya existen “vías suficientes” para esclarecer los hechos, como la investigación judicial en curso, la inspección interna del Gobierno y la labor del Consejo de Seguridad Minera.
Desde UGT Asturias, su secretario general, Javier Fernández Lanero, también se ha mostrado crítico con lo que califica como “uso político” de la tragedia. En su opinión, la consejera dimitida “actuó con compromiso, transparencia y justicia” y puso en marcha todos los mecanismos institucionales para esclarecer lo ocurrido.