Entre pitos y petardos, medio centenar de agentes permanecen concentrados ante el Ayuntamiento, mientras que varios de ellos han accedido al Pleno armados con pancartas
Sin uniformes, defensas o armas reglamentarias, aunque sí con pancartas, silbatos y petardos, más de medio centenar de agentes de la Policía Local de Gijón permanece concentrado esta mañana en la Plaza Mayor, ante el Ayuntamiento, como mecanismo de presión para que el gobierno local negocie el convenio colectivo que rige la actividad del cuerpo. Ante un dispositivo de seguridad que incluye a varios de sus compañeros, así como a agentes de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) de la Policía Nacional, algunos de los huelguistas han llegado a acceder al Salón de Plenos, donde en estos momentos se celebra la sesión ordinaria de abril.
El malestar de la Policía Local hunde sus raíces en el año 2019, cuando el convenio caducó. Desde entonces, el documento ha sido prorrogado sucesivamente, una medida que ha exasperado los ánimos de los agentes. Así las cosas, el pasado 1 de febrero se decretó una huelga de ‘bolis caídos’, y desde entonces se han sucedido las concentraciones frente al Ayuntamiento, convocadas por el Sindicato Independiente de Policía Local de Asturias (SIPLA) y por la Confederación de Seguridad Local (CSL). La base de la protesta la negociación de los grados de la carrera profesional, y un reajuste de precios de los días festivos y turnos nocturnos trabajados. También demandan que a los sábados se les asigne la consideración de festivos.