Varios agentes de paisano reforzarán el despliegue de uniformados en la zona de ocio nocturno, mientras se mantiene la mirada en la concentración convocada por la FAV en el barrio para las 20 horas de este viernes

Toda acción tiene su reacción, a menudo lógica e inevitable. Y doce días después de la muerte ante un pub de Fomento de José Antonio Justel, víctima de la paliza que le propinaron otros dos sujetos, y tras decenas de peticiones por parte de los habitantes no sólo de dicha zona, sino de Gijón en pleno, para que se tomen medidas de control sobre la forma de ocio nocturno que se da en sus calles, la Policía Nacional ha confirmado este jueves que, desde aquel trágico suceso, ha intensificado sus acciones en el lugar. Más agentes de patrulla y una intensificación de los controles realizados son las piedras angulares de un dispositivo que, en los próximos días, recibirá aún más refuerzos, en pos de garantizar la «seguridad y normalidad».
En paralelo a lo anterior, se incrementará la lucha contra el tráfico de drogas, para lo que se controlará tanto a las personas que pudieran dedicarse a
semejante actividad ilícita, como los locales que la toleren, así como el consumo de sustancias prohibidas en la vía pública. Para ello, y como la discreción es clave a menudo para garantizar el éxito policial, a los agentes de uniforme de Seguridad Ciudadana adscritos a la Unidad de Prevención y Reacción (UPR), al Grupo Operativo de Respuesta (GOR) y al Grupo de Atención al Ciudadano (GAC), que estarán de forma permanente en las principales zonas
de ocio nocturno de la ciudad, se incorporarán varios equipos integrados por compañeros vestidos de paisano, todos ellos pertenecientes a la Brigada de Policía Judicial. Todo ello se planteará en coordinación con la Policía Local, cuya contribución será clave, sobre todo, a la hora de inspeccionar locales de hostelería. Finalmente, se seguirá impulsando la idea de ‘tolerancia cero’ ante cualquier conducta violenta, sea en el ámbito que sea.