Pese a una ligera mejora respecto a 2023, la región sigue muy lejos del objetivo legal del 50% fijado para 2035

La recogida separada de residuos municipales en Asturias sigue sin alcanzar los niveles deseados. En 2024, el Consorcio para la Gestión de Residuos Sólidos de Asturias (Cogersa) trató 108.888 toneladas de desechos clasificados por la ciudadanía, lo que supone el 24,3% del total gestionado (448.077 toneladas). Aunque mejora el dato de 2023, que fue del 22,9%, continúa lejos del objetivo legal del 50% fijado para 2035.
Los datos reflejan un incremento notable en la recogida de materia orgánica, que aumentó un 25,57% respecto al año anterior, alcanzando las 13.405 toneladas. Este repunte se atribuye al despliegue del contenedor marrón en más de 30 concejos. También crecieron los residuos del contenedor amarillo (envases ligeros) y azul (papel y cartón), con subidas del 4,85% y el 5,17%, respectivamente. Sin embargo, la recogida de vidrio se mantuvo estable, y los residuos voluminosos como muebles y maderas aumentaron casi un 9%.
A nivel territorial, 14 de los 78 concejos superaron la media regional, con Coaña (33,27%), Oviedo (31,71%) y Gijón (31,22%) en los primeros puestos.
En total, Cogersa recibió 872.308 toneladas de residuos procedentes de hogares, comercios, industrias y otros sectores. Entre ellos, destacan los restos vegetales y estiércoles, que crecieron un 14% hasta las 20.949 toneladas, y los lodos de depuradoras, que aumentaron un 15%, alcanzando las 86.077 toneladas. Ambos tipos de residuos se transforman en compost de alta calidad, con la Etiqueta Ecológica Europea.
Asimismo, los residuos de construcción y demolición subieron un 6%, hasta las 177.835 toneladas, y los residuos industriales peligrosos aumentaron un 5,45%, con 44.407 toneladas tratadas. Pese a estos avances, Asturias aún tiene un largo camino por recorrer en materia de reciclaje.