El combinado ‘rojiblanco’ se medirá esta tarde con el Espanyol en campo ajeno; tras el triunfo de los catalanes en la ida, los de Miguel Ángel Ramírez necesitan, como mínimo, un 0-2 para disputar el ascenso con los ‘carbayones’
La alegría estallaba ayer en la grada ‘carbayona’ del estadio eibarrés de Ipurúa, en la misma ciudad de Oviedo y en buena parte del Principado: finalmente, habrá un equipo asturiano disputándose el ascenso a Primera en la final de los playoffs. Al menos, uno. Porque la victoria cosechada este miércoles por el Real Oviedo ante el Éibar, imponiéndose por dos goles a cero al combinado vasco y compensando así el empate a ceros de la ida en el Carlos Tartiere, deja única y exclusivamente en manos del Real Sporting la posibilidad de que ese duelo por el cambio de división se convierta en el tan temido como deseado derbi asturiano. Será esta tarde, a las 21 horas, cuando los de Miguel Ángel Ramírez vuelvan a verse las caras con un Espanyol crecido tras su victoria del domingo en El Molinón por un gol a cero. Y, por si fuera poco, en el RCDE Stadium, el feudo de los catalanes.
La alineación ‘rojiblanca’ aterrizó en Barcelona alrededor de las 22.20 de ayer, con cierto retraso debido a las malas condiciones climatológicas. Los jugadores ‘sportinguistas’ franquearon los controles del Aeropuerto de El Prat con un oído atento a la evolución del partido que todavía se jugaba en Ipurúa, y que, para entonces, ya se perfilaba como un éxito del Oviedo, gracias al gol marcado por Zurawski en el minuto 59. Veinte minutos más tarde, en el 79, Moyano anotaba el segundo tanto, confirmaba la presencia ‘carbayona’ en la final… Y multiplicaba la presión sobre la plantilla del Sporting. No en vano, los de Gijón, como mínimo, deberán meter dos balones en la portería del Espanyol sin que los catalanes anoten ningún tanto para rebasar el 0-1 logrado por el Espanyol en la ida. Sobra decir que no es un reto sencillo; el propio defensa ‘sportinguista’ José Ángel ‘Cote’ Valdés admitía hace pocos días que el Espanyol «es un gran equipo, con jugadores con más experiencia en Primera División».
Por supuesto, ese detalle no parece amilanar a los de Ramírez, que en cuestión de horas se jugarán el todo por el todo para regresar a la categoría reina. Independientemente de cuál de los dos combinados se alce victorioso en la semifinal de esta tarde, los partidos por el ascenso serán a las 18.30 del 16 y del 23 de junio, respectivamente. Sólo entonces se sabrá qué equipo se suma al prestigioso club de Primera.