ENTREVISTA CON CHEZA, JUGADORA DE FÚTBOL
(PREVIA: “Cuando me hacen ofertas de Primera División siempre pregunto si me van a pagar los estudios porque con el fútbol puedes quedarte sin nada”)
«A mí me dijeron que no el primer año que quería jugar al fútbol por ser una chica. He sido un bicho raro toda mi vida y creo que sigo siendo especial«
Quiero volver al fútbol femenino. La final de la Copa de la Reina entre Barça y Levante estuvo marcada por cierta polémica. Ni la reina Letizia, ni el presidente de la RFEF, Luis Rubiales ni tampoco el del FC Barcelona, Joan Laporta acudieron a la cita. ¿Este tipo de gestos como se encajan?
Como jugadora no es a lo que le das prioridad. Se la das a tu familia, a tus amigos, los que te apoyan día a día. Esa gente es política. Es cierto que el fútbol femenino no va a avanzar si no nos ayudan porque son figuras muy importantes en España, dicen mucho del fútbol femenino español y deberían darse cuenta que tiene que ir no solo por dar imagen, sino porque apoyas tu fútbol y a tus jugadoras. Tiempo al tiempo.
¿Se lo imagina en una final masculina?
La verdad que ni lo pienso. ¿Por qué no? Ellos deciden. Se han dado cuenta que el fútbol masculino es mas politiqueo que importante, pero en el femenino ha saltado la bomba y probablemente a la siguiente ya vayan.
Ahora es habitual, pero cuando era una chiquilla ¿sintió alguna vez que la miraban raro?
A mí me dijeron que no el primer año que quería jugar al fútbol por ser una chica. He sido un bicho raro toda mi vida y creo que sigo siendo especial. Era la única, pero estoy orgullosa de haber crecido en esa época. La guerrera que soy hoy en día es gracias a todos los compañeros que tuve, a esos momentos que tienes que pasar. Todas las jugadoras que estamos peleando por el futuro lo vamos a valorar mucho más que las generaciones que se lo van a dar todo hecho.
¿En Estados Unidos podemos decir que la mujer en el fútbol está más valorada?
Totalmente. En el fútbol y en la mayoría de deportes. En EEUU hay una cosa que se llama respeto e igualdad. También hay una realidad: si ganas le importas a la gente. El fútbol ha crecido porque la selección ganó, si hubieran perdido, probablemente, no serían nadie. Ahí está el ejemplo de Alex Morgan. Me he leído su historia y es pura imagen, gol, decir que lo ha conseguido. Si no llegasen a hacer eso no tendrían el apoyo con el que cuentan, pero a ellas les tenemos que agradecer todo lo que han conseguido para romper todos los records. Lo que pasado aquí ha influenciado a España.
Pese a su amor por el fútbol, le ha cogido gusto al surf en los últimos tiempos…
Llevo surfeando desde los seis años y es cierto que, últimamente, se me ve mucho más porque el año pasado con el COVID tuve la oportunidad de reengancharme a algo que no me habían dejado hacer con tanto gusto por el tema de lesiones. No sería la futbolista que soy sino surfease, es pura terapia psicológica. Cuando acaba la temporada corto balón durante un mes, me meto al agua, no pienso en nada y me ayuda para problemas de rodilla, tobillo y como portera en el tren superior: brazos, espalda, lumbares… Nunca he tenido una lesión porque voy con mucho cuidado cuando entro.
Y con alguna tabla rota.
¿Alguna? Llevo una racha que madre mía (risas)…
Además de fútbol y surf ¿con qué disfruta María Cheza?
Viajando. Cada vez que tengo un fin de semana libre, vuelo. Lo que más subo a mis redes puede que sean los viajes que hago porque me gusta enseñarle a la gente sitios bonitos donde pueden ir y, sobre todo, acompañarme en la aventura que, últimamente, cada que cojo un avión es una nueva (risas).
Precisamente pese a una vida llena de viajes, entrenamientos y estudios, es muy activa en sus redes. Cuéntenos de dónde saca el tiempo.
¿Quieres que te confiese una cosa? Odio las redes sociales, pero hay mucha gente que te sigue y tiene que darles lo que te piden. Cuando fui niña escribí mensajes a alguno de mis ídolos y nunca contestaban. A mi me gusta dar respuestas, enseñarles sitios y compartir con ellos lo bueno, e incluso, lo malo.
Lo mismo sube una foto entrenando que baila con sus abuelas. ¿Qué importancia tiene la familia para usted?
Lo son todo. Desde que me fui los he valorado muchísimo más que antes y mira que eso es complicado. Toda la vida he disfrutado pasando un montón de tiempo con ellos, ahora estoy el verano entero con mi abuela en el pueblo y es que vivimos tanta presión que cuando nos juntamos es una alegría, es paz. Uno de los últimos días en casa me pase la tarde tirada en el porche con mis padres sin hacer nada, pero era tranquilidad pura y dura, el disfrute de estar juntos porque no nos vemos nunca.
¿Se echa en falta Asturias cuando está fuera?
Ay sí, ¡qué bonita es mi tierrina! Tengo la suerte de que el tiempo en Carolina del Norte es parecido y de repente cambia, pero la cercanía, la comida y, sobre todo, el ambientillo se echa en falta. Los asturianos tenemos algo que engancha, somos muy de calle, muy cercanos y aquí se echa mucho de menos.
¿Confía en regresar algún día?
No lo sé porque no lo he pensado. Los clubes que hay en Asturias es cierto que no están en las máximas categorías, pero volveré. Igual no lo hago en los terrenos y sí dirigiendo, nunca se sabe.
Acaba de cambiar de dígito. ¿Lo ha notado?
Ayer entrenando me pesaban un poco más las piernas y mi entrenador me decía que igual eran los 20, que por eso no tiraba tanto (risas).
¿Sigue haciendo merchandaising?
De vez en cuando. Ahora mismo en la universidad acaban de abrir una oportunidad para vivir de nuestra imagen. Eso va a traer proyectos muy bonitos, muchas puertas que no podía pasar. Tengo muchas ganas de ver qué pasa porque la publicidad es un mundo espectacular.
Es decir, puede convertirse en un producto.
Exacto. Podemos firmar por marcas, tener representantes, hacer anuncios, ser imagen de ropa… Hay algo bonito que creo que va a gustar, pero no te puedo contar más.
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