La Xunta pola Oficialidad defiende que «no hay tipos de oficialidades amables o repunantes; hay derechos o no los hay», además de subrayar que «Asturias sigue con un Estatuto de Autonomía de segunda, del siglo pasado»
«La igualdad de derechos no tiene que llevar detrás ningún adjetivo» y por ende no hay «oficialidades amables». Ese rotundo mensaje ha iniciado la manifestación por la oficialidad del asturiano que esta mañana de sábado ha arrancado en Oviedo bajo la organización de la Xunta Pola Defensa de la Llingua. «No hay oficialidades amables, ni oficialidades gafes, ni oficialidades repunantes. Hay reconocimiento de derechos o no lo hay. No queremos derechos de segunda. Queremos derechos, simplemente», han destacado los músicos Leticia Baselgas y Pau Santiso, encargados de leer el manifiesto en la Plaza de la Escandalera.
Previo a la lectura del manifiesto, los manifestantes han recorrido las principales calles de Oviedo para reclamar la oficialidad del asturiano. Desde la Xunta recuerdan que son ya 37 años manifestándose y las demandas siguen siendo «más o menos las mismas«. Así, en el manifiesto leído se han preguntado «¿qué va hacer el PSOE?» y si va dejar que «Asturias siga con un Estatuto de segunda, del siglo pasado y todo por no saber liderar la renovación que precisa». «Esa renovación, entre otras cosas, tiene que poner fin a la discriminación del asturiano y del gallego-asturiano con las demás lenguas del Estado», indican.
En este sentido, un año más los manifestantes han pedido al Gobierno que dé respuesta a sus demandas para satisfacer esta reivindicación histórica y han reiterado que lo que se necesita es impulsar el debate en la Junta General para que se pongan encima de la mesa los argumentos que defienden y obligar así a todas las formaciones a posicionarse o del lado de la sociedad y sus derechos democráticos o del lado de la intolerancia.
«Sabemos que somos más y que tenemos razón de sobra. Y sabemos que vamos ganar esta lucha», han indicado en el manifiesto desde la Xunta Pola Defensa de la Llingua. La manifestación por la oficialidad de la lengua asturiana y el gallego-asturiano salió de la Estación del Norte de Oviedo a las 12.00 horas y atravesó la calle Uría para acabar en la Plaza de La Escandalera, donde se leyó el discurso de la convocatoria y donde participaron varios músicos de la escena asturiana para poner el ramo a una jornada de reivindicación. La organización reclama este año valentía y responsabilidad a la clase dirigente asturiana para el reconocimiento de la oficialidad y «para ponernos a la altura de las demás comunidades con lenguas propias diferentes del castellano».