El Consejo de Gobierno del Principado acaba de acordar varios aspectos honoríficos relativos a los expresidentes asturianos, con motivo del 35º aniversario de la inauguración del Palacio de la Presidencia, en 1986. De este modo, los expresidentes Rafael Fernández, Pedro de Silva, Sergio Marqués, y Vicente Álvarez Areces (todos fallecidos a excepción de De Silva) tendrán una sala con su nombre en Presidencia.
También se ha acordado un criterio de cortesía institucional para todos los expresidentes y también a futuro: el tratamiento de presidente con carácter vitalicio. El acuerdo, con todos los detalles, está recogido en la edición de hoy del Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA).
Expresidentes asturianos
“Para conmemorar el aniversario del Palacio de la Presidencia, al tiempo que se resalta la figura de varios de los expresidentes, el Gobierno ha decidido el reconocimiento honorífico de éstos mediante la asignación a varias de las estancias del Palacio”, recoge el texto del BOPA.
- Rafael Fernández fue presidente entre 1982 y junio de 1983 y dará nombre a la Sala de Recepciones sita en la planta baja. Fue el Presidente que inauguró la autonomía y bajo cuyo mandato Asturias se constituyó en Comunidad Autónoma uniprovincial.
- Pedro de Silva fue presidente del Principado entre 1983 y julio de 1991. Dará nombre al despacho presidencial, situado en la planta noble, la primera. Bajo su mandato se reformó e inauguró la actual sede de la Presidencia.
- Sergio Marqués fue presidente del Principado entre 1995 y julio de 1999 y dará nombre a la Sala de Reuniones ubicada en la planta segunda, sobre el despacho presidencial.
- Vicente Álvarez Areces fue presidente del Principado entre 1999 y julio de 2011. Dará nombre a la Sala de Encuentros situada en la segunda planta. Bajo su mandato se reformó el palacio presidencial, manteniéndose su configuración, con ligeras adaptaciones de espacios, hasta la actualidad.
También para el futuro
Para justificar la elección de estos cuatro expresidentes (se han quedado fuera Juan Luis Rodríguez-Vigil, Antonio Trevín, Francisco Álvarez-Cascos y Javier Fernández), el consejo de Gobierno explica que, por una parte, existe una “voluntad de distinguir a los presidentes ya fallecidos”, aunque en el caso de Pedro de Silva, la distinción se debe a “su vinculación con el edificio, por ser el primer Presidente asturiano en ocupar este sede e inaugurarla»
No obstante, se han establecido para todos los expresidentes (y así se aplicará también en el futuro) tratamientos de cortesía institucional “de modo que se contribuya al necesario realce de una figura fundamental en la Comunidad Autónoma”.
Por Marta Pérez
