La consejera de Educación se muestra a favor de restringir su uso más allá de la utilización pedagógica en actividades supervisadas
La consejera de Educación, Lydia Espina, ha indicado que la postura que el Principado defenderá sobre el uso del móvil en los centros educativos será restringirlo en Primaria y limitarlo en Secundaria a una herramienta pedagógica supervisada por los profesores. Con todo, Espina ha querido dejar claro que en Primaria no existe el debate, ya que es «residual» y «anecdótico» el número de alumnos que tienen un móvil a esa edad, pero que, en todo caso, ven bien «restringir» su uso en el centro.
Diferente es la situación a partir de Secundaria, donde, siempre tutorizados por los docentes y dependiendo de la autonomía del centro y de los maestros, el móvil puede tener un uso pedagógico en determinadas actividades. Espina, a preguntas de los periodistas este jueves en Oviedo, no ha querido hablar de prohibiciones, pero ha indicado que fuera de ahí «no debería utilizarse por los alumnos».
Esta es la idea que el Gobierno asturiano llevará a la reunión entre Ministerio y comunidades que se celebrará en enero, donde el Principado se ha mostrado abierto al diálogo y a escuchar los puntos de vista de otras regiones. «Lo importante es conseguir un consenso a nivel nacional», ha indicado Espina, que ha esperado que la reunión permita alcanzar una «herramienta jurídica» para conseguir que el uso del móvil sea sólo pedagógico.
Así, el Principado coincide con la propuesta de la ministra Pilar Alegría, que consistiría en prohibir el uso en Primaria y permitir su uso en Secundaria siempre que sea tutorizado como una herramienta educativa más, al igual que pasa con ordenadores o tablets. En ese sentido, Espina ha recordado que su Consejería ha abierto una nueva línea de formación mediática para educar en el uso de las redes sociales y en los móviles. Del mismo modo, ha recordado que en esta legislatura cuentan con una Dirección General de Infraestructuras y Tecnología Educativa.