El complejo deportivo renueva su iluminación y marcadores electrónicos para mantener la actividad de los más de 32.300 jugadores que hacen uso de las pistas en la actualidad
Para enumerar los clubes que utilizan el complejo deportivo de la universidad Laboral hace falta coger bastante aire. A fútbol juegan el Asunción CF, el Valederas y la escuela Fútbol Jin. En hockey está el Lloberu H.C., el equipo del Codema, Hockey Mamis y los entrenamientos y cursos que organiza la Federación de Hockey del Principado de Asturias (FHPA). De béisbol y sóftbol, en el campo gijonés podremos encontrarnos a Club Miners, Llano, Club Junior y la Selección Asturiana de Béisbol, mientras que en el de rugby estarán los grupos masculino y femenino de Gijón Rugby junto al equipo de padres y otros dos conjuntos de los Mariners en fútbol americano. El balance es de: 5 campos, cerca de 7 modalidades deportivas y al menos 16 clubes y entidades que cuantifican la envergadura de estas instalaciones y cuya actividad las obliga a tener que pasar por chapa y pintura de tanto en tanto.
Aún así, su jefe de Instalación, José Luis Fernández, intenta dar cuenta durante un paseo por el césped de la calidad de algunas pistas, de «última generación» y provistas de «lo último». El césped en los campos de fútbol, rugby y hockey es nuevo, sintético y con un drenaje capaz de ahorrar el 80% del agua que se utiliza en el riego para reutilizarlo después. Los de béisbol y sóftbol son de hierba natural, no tan recientes, pero constituyen los únicos dedicados a estas disciplinas en Asturias a excepción de otros en La Morgal (Oviedo). Lo cual no quita que, en efecto, haya habido que poner a punto un par de detalles para atender la demanda de los más de 32.300 usuarios que practicaron deporte en los campos de La Laboral el año pasado, según los datos que maneja el Patronato Deportivo Municipal. Entre ambas actuaciones, la entidad ha hecho un desembolso total de 166.347 euros.
El complejo de La Laboral en cifras: 5 campos, 7 modalidades, cerca de 16 clubes y entidades usuarias, y más de 32.300 usuarios al año
Lo principal era la iluminación del campo de fútbol, una obra «vital» al condicionar la celebración de competiciones en el complejo. «El alumbrado de antes no permitía jugar un partido de competición en las horas del día sin luz natural y eso en invierno podía provocar que se suspendiese algún encuentro por falta de tiempo entre el horario de unos y otros», explica el responsable. La semana pasada terminó la intervención de tres meses con las que los postes anteriores se vieron sustituidas por las seis torres de LED que ahora iluminan el campo literalmente a demanda, ya que las nuevas luces pueden regular su intensidad y encenderse por partes en el espacio. Fernández admite que desde los equipos ya «respiran tranquilos» después de librarse de los «malabares horarios» para jugar a la luz del día.
A las luces pronto las acompañarán los nuevos marcadores electrónicos también en la superficie destinada a fútbol, además de rugby y hockey. La semana que viene estarán listos, aunque no se pondrán en funcionamiento hasta una próxima temporada de tintes bien renovados para los de La Laboral. Aún con todo, en el Patronato se reservan sus intenciones de empezar actuaciones más complejas hasta un tiempo en el complejo de la universidad, ya que «los equipos cada vez se profesionalizan más» y en verano, las instalaciones seguirán a pleno rendimiento con las pretemporadas y algún campus de verano que organizan entidades como la FHPA.
Una de ellas tarde o temprano será la renovación de las cuatro pistas polideportivas de menor tamaño dispuestas en el complejo junto al campo de fútbol. Están adaptadas para jugar a tenis, baloncesto y fútbol, pero se encuentran hundidas en el terreno que las encierra en cuatro paredes de hormigón. Esta condición hace que incumplan la distancia de seguridad que la normativa establece necesaria alrededor de las pistas, y por ello aún barajan distintas posibilidades de futuro, como utilizarlas para voley playa, ya que se juega con dimensiones más pequeñas. Para ellas todo está por ver, pero el resto de instalaciones en el complejo ya pueden anotarse un tanto en su nuevo marcador en lo que a mantenimiento se refiere.
