Melchor, Gaspar, Baltasar y el príncipe Aliatar han llegado esta mañana al Puerto Deportivo, donde, a pesar de la lluvia, han contado con un caluroso recibimiento
Un año más, Sus Majestades los Reyes Magos Melchor, Gaspar, Baltasar, y el príncipe Aliatar cumplieron la tradición, y desembarcaron en el Puerto Deportivo de Gijón. Lo hicieron a bordo de un barco de la Guardia Civil, poco después de las 10h de la mañana, y ante la atenta mirada de quienes, pese a la lluvia, se trasladaron hasta el lugar para recibirles entre vítores y aplausos. Y es que ni la lluvia ni el frío parece poder con la ilusión de los y las más pequeñas.
Tras su llegada, Sus Majestades han realizado sus primeras declaraciones, ya en suelo gijonés. Ha sido Melchor quien ha tomado la palabra para confirmar «el comportamiento excelente» que han tenido los niños gijoneses este año. «Tenemos unos informes maravillosos de nuestros Pajes Reales, así que este año venimos de cargadísimos de regalos para todos«, señalaba sonriente el Rey Mago. Aunque Gaspar confirmaba «haberlo pasado un poco mal» en su llegada por mar, debido a la mala climatología, Melchor apuntó que, desde luego, «la ilusión no se va a parar por la lluvia».
Desde el Puerto, sus Majestades se han desplazado hasta la plaza del Marqués, donde han sido recibidos por las autoridades, entre las que se encontraba la alcaldesa de la ciudad, Carmen Moriyón, la vicealcaldesa y concejala de Economía, Empleo, Turismo e Innovación, Ángela Pumariega, y el concejal forista Jesús Martínez Salvador. A partir de las 11.30 horas, en coches oficiales descapotables, y sin bajarse de los vehículos, Sus Majestades desfilarán por las calles del centro de la ciudad recibiendo el cariño de todos los niños y niñas que se han acercado a verlos.
Recorrerán así arterias tan señaladas como las avenidas José García Bernardo y de la Costa, las calles Carlos Marx y Marqués de San Esteban, o la plaza Mayor, donde concluirá el trazado en torno a las 12.45. Justo después, a la 13h, se recuperará la recepción en el Ayuntamiento, para la que es posible hacer cola hasta esa misma hora, y en la que los más intrépidos aguardan desde las 6 horas de esta madrugada.