Afirma que la “escasez de sondeos” se debe al bajo coste de las oferta ganadora del concurso público
La concejala de Economía, Empleo, Hacienda y Administración General, María Pineda, compareció ayer ante los medios para valorar la Comisión Especial de Investigación del Pozo de Tormentas de Hermanos Castro, y lo hizo siendo crítica con el anterior equipo de gobierno, en manos de Foro.
Para la edil socialista, ha quedado demostrado – con la declaración del responsable de Prointec – “el empeño del anterior gobierno en rescindir” la primera contratación para contratar un segundo proyecto, con una nueva empresa constructora. Tras este proceso, en el que el proyecto sufrió varios modificados, se “terminó volviendo al método constructivo que se había planteado en el primer momento”.
Pineda quiso dejar claro que, aunque desconocen las razones que tuvo el gobierno forista, “hay muchas cuestiones poco claras, poca transparencia y mucha opacidad”, además de destacar que existió “mucha ocultación deliberada de información”.
Para el actual gobierno socialista, un aspecto clave de toda la polémica que rodea el pozo de tormentas, es la cuestión económica. Si bien reconocen que los contratos no se pueden calificar de “bajas temerarias”, sí que alude a su bajo coste el hecho de que “no se analizara suficientemente el terreno”. Esta “escasez de sondeos”, en palabras de la propia Pineda, “contribuyó sin duda a todos los sucesivos errores, todas las sucesivas modificaciones y las rescisiones de contratos” que se produjeron a lo largo de la obra.
Foro responde
El partido forista, sin embargo, no comparte la opinión de la concejala Pineda. En respuesta a estas acusaciones, Foro considera que «si algo ha quedado claro hoy en la comparecencia del responsable de la ingeniería redactora del primer proyecto constructivo del pozo de tormentas fue la diligencia de Foro al rescindir el contrato» ya que de esa forma se evitarían «los sobrecostes millonarios» que se hubieran producido y que el responsable de Prointec «ha reconocido».
Según el partido que gobernaba en Gijón en aquella época «la contratación fue dirigida por los antiguos responsables técnicos de la EMA, estaba infradotado presupuestariamente y sólo se realizaron cuatro prospecciones geotécnicas, menos del 10% de las realizadas por la ingeniería redactora del segundo proyecto».