«Comenzó a jugar al fútbol en el barrio de La Calzada, en las filas del equipo infantil de La Furia, de donde pasó —tras destacar como delantero centro— a los de La Carreñina, Moreda y Pelayo de Jove, ya entonces como centrocampista. En el verano de 1951 fue fichado por el Sporting, que entonces militaba en la máxima categoría del fútbol español»

El sportinguismo está de luto tras el fallecimiento de Armando Menéndez Medina. El que fuera mito del conjunto rojiblanco nos dejó ayer a los noventa y dos años. Medina, que lo fue casi todo en el Sporting, comenzó a jugar al fútbol en el barrio de La Calzada, en las filas del equipo infantil de La Furia, de donde pasó —tras destacar como delantero centro— a los de La Carreñina, Moreda y Pelayo de Jove, ya entonces como centrocampista. En el verano de 1951 fue fichado por el Sporting, que entonces militaba en la máxima categoría del fútbol español.
Ya desde su llegada se hizo un hueco como mediocentro en el once rojiblanco, alternando posteriormente esta posición con la de interior derecha, para retrasarla a la defensa a medida que los años pesaban en el excelente jugador gijonés. En total estuvo quince temporadas militando en el primer equipo sportinguista y vistió la camiseta rojiblanca en 356 partidos oficiales, anotando veinte goles. Fue el jugador gijonés que más veces lució la camiseta del Sporting, el tercero en la historia en cuanto a partidos disputados con el club rojiblanco en Segunda División (tras Sastre y Montes), el alma y primer presidente de la Asociación de Veteranos del club.
Por si todo esto fuera poco, recibió el cariño de la afición desde el primer momento. Su entrega y su espíritu combativo hicieron ganarse desde su debut —acontecido en Vigo el 10 de noviembre de 1951— a la gran mayoría de aficionados de El Molinón, y fue el primer jugador sportinguista en tener una peña con su nombre. Fundada en diciembre de 1951 como Peña Deportiva Medina (posteriormente Peña Deportiva Sportinguista Medina), tenía su sede en la Avenida de Galicia, número 8, en el barrio de La Calzada, en la sidrería Las Cancelas. Se va, pues, un gran hombre, un fantástico jugador y un pedazo fundamental de la historia de nuestro club.