Los vecinos denuncian que el barrio se ha convertido en un espacio de ocio constante que afecta gravemente al descanso, la movilidad, la seguridad y la salubridad de sus residentes

La Asociación Vecinal de Cimavilla continúa con su campaña de recogida de firmas para exigir al Ayuntamiento de Gijón medidas urgentes que frenen la saturación del barrio alto. Tras una reciente reunión con representantes de Divertia y del área de Festejos, el colectivo vecinal ha decidido mantener viva su protesta y entregará la próxima semana a la alcaldesa Carmen Moriyón más de 1.000 firmas recogidas puerta a puerta y en distintos establecimientos del barrio.
La principal reclamación es la retirada del planteamiento del «Paseo Gastro», previsto en la calle Claudio Alvargonzález, al considerar que contribuiría aún más a la sobrecarga de eventos que ya sufre la zona. Denuncian que Cimavilla se ha convertido en un espacio de ocio constante que afecta gravemente al descanso, la movilidad, la seguridad y la salubridad de sus residentes.
Además, solicitan la ampliación del servicio de seguridad ciudadana los fines de semana y en fechas señaladas como San Juan, Carnaval o la Semana Grande, con presencia policial nocturna específica en Cimavilla. También exigen el cumplimiento efectivo de la ordenanza de convivencia y una mayor participación vecinal en las comisiones municipales relacionadas con la seguridad y la planificación de eventos.
Como parte de la campaña, la asociación convoca una concentración el jueves 24 de julio a las 19:00 horas, bajo el lema «Cimavilla, un barrio donde poder vivir». La movilización recorrerá algunos de los puntos más emblemáticos del barrio alto, en defensa del derecho de sus habitantes a un entorno habitable y respetuoso.
Con el hashtag #CimavillaExiste, los vecinos buscan visibilizar en redes sociales una problemática que, aseguran, ha sido ignorada durante demasiado tiempo.