La ministra de Hacienda y Función Pública en funciones ha asistido este jueves en Asturias a la Escuela Internacional de Verano Manuel Fernández López ‘Lito’ que se celebra en Oviedo
María Jesús Montero, ministra de Hacienda y Función Pública en funciones, ha asistido este jueves, 7 de septiembre en Asturias, a la Escuela Internacional de Verano Manuel Fernández López ‘Lito’, que se celebra estos días en la ciudad de Oviedo. Allí, la socialista ha tenido tiempo de atender a los medios de comunicación y aclarar así, distintas cuestiones. La ministra ha garantizado que si Pedro Sánchez sigue como presidente del Gobierno, el cambio del modelo de financiación autonómica será «una prioridad» siga siendo ella o no ministra.
A preguntas de los periodistas, Montero ha dicho que una de las claves es que las comunidades autónomas abandonen su posición de máximos, de tal forma que se pueda llegar a un acuerdo «en el que todo el mundo gane» y que los gobiernos regionales que se consideran que están mal financiados puedan tener recursos para sostener el estado del bienestar. La ministra de Hacienda ha explicado que ella tiene un «gran conocimiento» del modelo de financiación autonómica por su experiencia previa como mandataria del Gobierno de la Junta de Andalucía. Ha dicho que conoce bien las «diferentes sensibilidades».
Preguntada sobre si las exigencias de determinadas fuerzas nacionalistas podrían afectar a regiones como Asturias en la financiación autonómica, Montero ha destacado que el PSOE «siempre ha sido garante de la igualdad entre todos los españoles y de oportunidades de todos los territorios». Además, ha dicho que el PP debería explicar cuál es el modelo que defiende para la próxima financiación autonómica. Ha afirmado que ha escuchado propuestas diferentes de los ‘populares’ según las planteen desde Galicia, Madrid o Andalucía.
Por otra parte, Montero ha evitado pronunciarse este jueves sobre la constitucionalidad de una posible ley de amnistía, tal como pide el expresidente de Cataluña, Carles Puigdemont. «Yo no soy constitucionalista, ese debate pertenece a los expertos», ha contestado cuando ha sido preguntada en una rueda de prensa en Oviedo sobre si el Gobierno creía que esa amnistía cabe en la Constitución Española. Montero ha explicado que el Gobierno está trabajando por una «convivencia fluida» en el país, primando el «diálogo» y alejándose de la «política de confrontación».
Eso sí, la dirigente ha dicho que en las negociaciones que se establecen desde el PSOE siempre serán con la Constitución como referencia y como «paraguas». Ha negado Montero que desde el Gobierno hayan cambiado de posición porque siempre han apostado por la necesidad de diálogo. A partir de ahí, la socialista ha explicado que el resto de grupos políticos pueden hacer las declaraciones que estimen oportunas. De ahí se extrae que las posiciones del PSOE están separadas en algunas materias de otros partidos, no solamente Junts. Pero ha insistido en que la responsabilidad de los socialistas es «abrir un camino de convivencia». Lo harán, ha comentado, con «discreción» y buscando el «entendimiento» para lograr un gobierno «progresista».
El exvicepresidente del Gobierno e histórico dirigente del PSOE, Alfonso Guerra, ha pedido a su partido, en una entrevista en COPE, que no apruebe una amnistía tal como pide el expresidente de Cataluña, Carles Puigdemont, al que ha llamado porque supondría una «condena a la Transición». Preguntada por qué opina sobre las declaraciones de Guerra hasta en dos ocasiones, Montero se ha limitado a declarar que tiene «respeto y cariño» al veterano político socialista.
La ministra de Hacienda y Función Pública en funciones también ha aprovechado para cargar contra el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, del que ha dicho que comete «bandazos» al hablar en un momento de ‘encaje territorial’ para Cataluña y horas más tarde desdecirse. «Una mañana dicen una cosa y por la tarde se desmienten», ha criticado Montero, que atribuye esa situación a la «crítica interna» que Feijóo tiene en su propio partido.
Por último, preguntada por la decisión de la expresidenta del Congreso de los Diputados Meritxell Batet de dejar la primera línea de la política, Montero ha dicho que respeta su decisión. «Sus razones responden de forma exclusiva a cuestiones personales», ha añadido, explicando que la propia Batet se refirió al clima de «falta de respeto» que a veces se vive en el Congreso de los Diputados, que deriva en situaciones «bastante desagradables».
