La inauguración contó con varios de los protagonistas de aquellas marchas: «Creíamos que era un acto necesario y que teníamos que hacerlo»

Era una «deuda histórica». Así hablaba este viernes la alcaldesa, Carmen Moriyón, en la inauguración del parque de ‘La Marcha de Hierro’ en el entorno de La Calzada, en Gijón, un espacio que rinde homenaje a uno de los movimientos sindicales de mayor relevancia en la historia industrial de Asturias. Era el año de las Olimpiadas de Barcelona, pero 1992 tiene un recuerdo diferente en el Principado. Fue entonces cuando un grupo de 250 trabajadores asturianos caminaron desde Gijón hasta Madrid con el objetivo de reivindicar el futuro de la industria siderúrgica en la región. Salieron de la ciudad el 9 de octubre para llegar a Madrid, objetivo de la marcha, 18 días después, el 26 de octubre de 1992.
Aquel periplo reunió a un número significativo de trabajadores del sector, incluyendo a medio millar de participantes del País Vasco, recordó ayer Moriyón, y culminó con una concentración de más de 50.000 personas en Madrid. En sus palabras, la movilización logró influir en la modificación del plan de competitividad industrial, permitiendo que Asturias mantuviera una industria siderúrgica activa, que a día de hoy sigue siendo pilar económico de la comunidad: «Fueron 18 jornadas de una solidaridad sin precedentes».

Emotivas fueron las palabras de María Ángeles Moro, una de las participantes de aquella marcha, quien recordó la crisis del sector siderúrgico en Europa y España en aquella época y la necesidad de inversiones para modernizar la industria. «Fueron 18 días muy duros, caminamos personas que no teníamos hábito, hacíamos una vida sedentaria y caminar por el asfalto con el peralte de las carreteras supuso muchas secuelas en muchos trabajadores». Relató cómo, tras diversas movilizaciones sin resultado, se tomó la decisión de recorrer a pie la distancia entre Gijón y Madrid con el fin de llevar sus reivindicaciones al Gobierno: «Creíamos que era un acto necesario y que teníamos que hacerlo».
Asimismo, Eladio José Braga, otro de los participantes entonces, quiso destacar ayer la unidad sindical que se logró en aquellos momentos y recordó, también, a quienes formaron parte de la marcha y fallecieron desde entonces. De igual manera, instó a las organizaciones sindicales actuales a continuar con la defensa de la industria en Asturias: «No es descartable ninguna movilización para defender lo que en su día nos duró en principio 33 años. Esperemos y estamos seguros de que los compañeros que ahora rigen las diferentes organizaciones sindicales van a estar a la altura de las circunstancias».