Este viernes ha sido el turno de la viuda y los dos hijos del concejal de Llanes asesinado. También de la esposa del presunto inductor del crimen
La viuda y los dos hijos de Javier Ardines, el concejal de Llanes asesinado en agosto de 2018, han dibujado este viernes la personalidad de fallecido como la de «un hombre de costumbres«, destacando que salía de su casa siempre a la misma hora a faenar y utilizaba de manera habitual el mismo vehículo durante su declaración de este viernes en la Audiencia Provincial. Unas costumbres que, según ha corroborado la viuda del edil, Pedro Nieva, acusado de ser el inductor del crimen «por supuesto conocía». También han coincidido en señalar los tres la presencia de una valla en el camino que iba hasta la vivienda desde principios de agosto del año del crimen, sin que hubiera ningún motivo para que estuviera en el lugar.
La mujer de Javier Ardines ha sido la primera en prestar declaración destacando que antes del crimen tenía «buena relación» con el acusado, Pedro Nieva, con el que «hacían planes juntos». «Cada vez que venían salíamos juntos. Teníamos una relación de amistad, de parentesco y de salir mucho», ha manifestado. A preguntas de la Fiscal ha relatado que ella estaba de viaje en el Líbano el día de la cena en la que Pedro Nieva grabó a Ardines y a su mujer y descubrió así la relación entre ambos. No obstante ha indicado que Nieva le dijo que ya tenía sospechas de esa grabación.
«Una alteración»
«Hablamos de la grabación y de las sospechas que Pedro tenía y que eran anteriores a la grabación, me dijo que ella no quería hacer planes con él porque siempre quería estar aquí -en Llanes- con nosotros», ha explicado a preguntas de la Fiscal, Belén Rico. Ha indicado que esa grabación se la envió Pedro Nieva a ella y a su hija el 5 de agosto. «Yo en principio no la escuché, lo hizo mi hija y cuando nos enteramos de lo que iba la escuché». Preguntada si habló con su marido de esa grabación ha respondido «sí, por supuesto». «El no le dio importancia«, ha manifestado, reconociendo que para ella «desde luego que supuso una alteración«.
La hija de Javier Ardines también se ha referido a esta grabación y ha indicado que tras recibirla por parte de Pedro Nieva mantuvo varias conversaciones con él en las que le dice que «grabó la conversación porque sospechaba de la infidelidad de su mujer«. «Me dijo que estaba destrozado y que había escuchado la conversación muchas veces», ha dicho la hija de Ardines, que ha indicado que el acusado incluso le comentó que controlaba a qué hora se concetaba su mujer. Preguntada por sus declaraciones ante los agentes en el momento de los hechos en los que relató algunos recuerda la declaración de la hija de Ardines, el 16 de agosto, cuando le preguntaron sobre los focos de conflicto de su padre la testigo ha manifestado que «en ese momento, encuentran a tu padre asesinado y hablas de todos los focos de conflicto, porque no tienes nada que esconder».
Más testimonios
Por su parte el hijo de Javier Ardines, que en el momento de los hechos vivía en el domicilio familiar, también ha coincidido en señalar que su padre era un hombre de costumbres y ha señalado la presencia de la valla en el camino desde días antes del asesinato. La de este viernes es la séptima jornada del juicio contra los cuatro acusados de asesinar al concejal llanisco. En el banquillo se sientan Pedro Nieva como supuesto inductor del crimen, Jesús Muguruza, acusado de ser el intermediario con los dos supuestos autores materiales de la muerte de Ardines, Maamar Kelii y Djilali Benatia. Los cuatro se enfrentan a una pena de 25 años de prisión.
Previamente a la comparecencia de los familiares de la víctima han prestado declaración más agentes de los que han participado en la investigación del crimen. Entre ellos los agentes que interrogaron a la mujer cuyos restos de ADN aparecieron en el escenario del crimen, la ropa, el cuerpo o el coche de la víctima Javier Ardines. El agente que le tomó la primera declaración a esta mujer ha manifestado que no se plasmó inicialmente que mantenía una relación sexual con Ardines «al efecto de evitar consecuencias a terceros». «Se comentó el hecho y se valoró así porque estábamos en una fase muy inicial de la investigación», ha explicado el agente. También ha prestado declaración ha sido el agente que participó en el registro del domicilio del acusado de ser el intermediario del asesinato, Jesús Muguruza, que ha negado que en dicho registro «se excediesen en sus funciones«.