«¿Por qué no puede ponerse un tutú una mujer con curvas, o casarse de playeros una novia o una sexagenaria llevar el pelo rosa?», se pregunta la artista
Nieves Álvarez es una mujer con inquietudes y con la mente más que despejada. Expone veinte acuarelas de gran formato en la sala de la Fundación Alvargonzález, en Oscar Olavarría 11, hasta el día 10 de este mes.
Con un parón de unos años, mientras su hijo era pequeño, volvió con fuerza al pincel y a la técnica que más le gusta: la acuarela. “Es una técnica muy difícil, complicada de corregir si te equivocas en una pincelada”, confiesa, pero que «engancha».
Pertenece a la Asociación de Acuarelistas de Asturias, Acuarelastur, y recuerda su vuelta a la pintura con una quedada en el Parque Isabel La Católica. “Pinté un árbol que tengo guardado como un tesoro”, confiesa con emoción por lo que significó en su día: la decisión de retomar su pasión.
«Pinto según mi estado de ánimo», como bien confiesa ella. «Estoy en una etapa de mi vida en la que me fastidia mucho que, porque alguien diga una cosa, porque sí, tenga que hacerse». Y se refiere tanto al arquetipo de belleza, como a la forma de vida, al estilo de vestir…
Esa reivindicación de la artista hace entender bien el título de la muestra ‘Ahora yo’ y el porqué de sus palabras y de parte de la obra colgada.
«¿Dónde están los límites de lo que uno desea y quién los establece?». Como respuesta una serie de lienzos de ella misma, en diferentes posturas: “Me he metido en mí misma, es un momento de mirar para mí”
En cuanto a las demás obras, llaman la atención las diferentes poses de una bailarina curvy, que de hecho es una modelo brasileña, a la que la artista pidió permiso para pintarla.
«¿Por qué no puede ponerse un tutú una mujer con curvas, o casarse de playeros una novia o una sexagenaria llevar el pelo rosa?», se pregunta. Todas esas protagonistas están reivindicadas en esta bonita exposición de Nieves Álvarez, que promete con seguir sorprendiendo.