El certamen internacional, que se celebrará en Gijón la última semana de agosto, mejora y amplía la oferta de la cita de 2024, y aspira a superar el total de 44.932 espectadores cosechado el año pasado

Es el último faro deportivo del verano gijonés. Una suerte de bocanada de aire postrera que sirve de despedida a los momentos centrales de la temporada estival. Así, de una forma no exenta de cierta lírica, es como organizadores, participantes y aficionados a los deportes ecuestres llevan viendo el Concurso Hípico Internacional de Gijón desde el mismo instante de su fundación. Y este año, coincidiendo con la que será su 81ª edición, ese romanticismo parece destinado a multiplicarse. Al fin y al cabo, el gran evento centrado en el mundo del caballo retornará del 26 al 31 de agosto con una imagen completamente renovada, y acompañado de grandes novedades, desde el aumento de la oferta comercial que lleva asociada, hasta la recuperación de la ‘Speed Final’, prueba que aúna habilidades de caza, velocidad y maniobrabilidad a caballo. Un compendio de posibilidades al alcance de todos los seguidores, que volverá a reunir en el Complejo Deportivo Las Mestas a algunos de los nombres más destacados de la disciplina del salto, y que esta mañana ha sido presentado por el concejal de Deportes, Jorge Pañeda, quien ha estado acompañado por el laureado jinete asturiano Julio Arias, y por Alejandro Ancín , responsable de la empresa In2striders, encargada de la dirección deportiva y de la secretaría técnica.
En total, será dieciséis las pruebas que se disputarán esos días, con tres de ellas de ellas concentradas en el Concurso de Salto Internacional (CSI) de una estrella, otras seis adscritas al de tres estrellas, y las siete restantes reservadas al de cuatro estrellas; entre todas esas pruebas, el valor de los premios alcanzará los 520.000 euros. Y será precisamente en el CSI de cuatro estrellas en el que se registrará una de las grandes novedades de esta edición, ya que, si hasta la fecha se autorizaba a cada jinete a concurrir con dos caballos, algo «bastante exigente para los animales», a juicio de Pañeda, esta vez será posible acudir con tres equinos por participante. Por otra parte, en la noche del sábado volverá a disputarse la ‘Speed Final’, una prueba calificativa para los treinta mejores jinetes del concurso hasta ese momento, y que llevará aparejada una dotación económica de 6.000 euros, ajena a los montantes de los CSI anteriores. Los obstáculos, reparos, barras y tablones serán renovados y, fuera de las pistas, los cambios también incluirán la instalación, en la curva norte, de una grada adicional, a modo de «experiencia piloto».
No obstante, la más visible de las actualizaciones será el cambio de imagen, ya presente en los carteles que anuncian el certamen. Así, la estampa tradicional del Hípico da paso a la figura de una amazona saltando sobre el globo terráqueo, lo que, en palabras de Pañeda, constituye «una ruptura con lo tradicional», amén de «una alegoría del evento, que no te puedes perder y que es la guinda del final del verano gijonés». Una guida que en el Patronato Deportivo Municipal (PDM) se han propuesto hacer más sabrosa que nunca; en consecuencia, el conjunto de Las Mestas será sometido a obras de acondicionamiento, abriendo espacio a oficinas, espacios para las apuestas y puntos para protocolo, y habilitando una taquilla extra. Finalmente, si el año pasado se puso en práctica la digitalización de la compra y renovación de entradas y abonos, lo que permitió agilizar las fases de adquisición y acceso al recinto, este año se hará lo propio con las acreditaciones.