Portaban una barra de hierro y unos cuchillos de grandes dimensiones
El Juzgado de lo Penal número 3 de Gijón acogerá este viernes el juicio contra los asaltantes a una familia de lagareros en Gijón, en agosto de 2018 La Fiscalía pide siete años de cárcel y multas para cada uno de los acusados. De acuerdo al relato de la Acusación pública, los tres primeros acusados, junto con otra persona que no ha podido ser identificada, se desplazaron a Gijón el 16 de agosto de 2018 en un coche conducido por el cuarto investigado.
Sobre las 23.00 horas del día 17, los acusados, en compañía de otro individuo no identificado, acudieron a una vivienda en la carretera AS-248 Gijón-Siero, en Fano, Gijón, con el rostro totalmente cubierto con un pasamontañas, al igual que las manos con unos guantes, y portando una barra de hierro y unos cuchillos de grandes dimensiones.
Una vez allí accedieron a la casa saltando el muro medianero que la separa de una explanada y lograron introducirse en el interior del inmueble aprovechando que la puerta de una de las terrazas se encontraba abierta. Una vez dentro de la casa, los acusados, en compañía de otra persona no identificada, se dirigieron primero al salón, donde se encontraban los agredidos.
Nada más entrar en una de las habitaciones en las que se encontraba otra de las víctimas, los acusados se dirigieron al hombre esgrimiendo los cuchillos y comenzaron a propinarle golpes por la cabeza al tiempo que le exigían que les entregase dinero. Los acusados rompieron los muebles y enseres de la habitación para intentar conseguir dinero y objetos valiosos.
Hicieron lo mismo en el resto de las habitaciones y dependencias del inmueble, consiguiendo sustraer 8.500 euros en efectivo, de los cuales 5.000 euros procedían de la recaudación de la sidrería propiedad de la familia. Sustrajeron además diversas joyas y otros efectos, y las llaves de un vehículo Mercedes ML 300.
Las llaves fueron utilizadas por los acusados y la otra persona que les acompañaba para arrancar el Mercedes y desplazarse en el mismo hasta el aparcamiento que hay en las inmediaciones de la rotonda de salida de Pola de Siero hacia Vega de Poja, donde abandonaron el coche y emprendieron la huida en el vehículo que habían utilizado para llegar previamente a Gijón.
La Fiscalía considera que los hechos son constitutivos de un delito de robo con violencia e intimidación, otro de lesiones y otro por delito de hurto de vehículos. Es la tercera vez que se programa este juicio. En un caso, se suspendió por enfermedad de un abogado y en el segundo por una incompetencia entre sistemas informáticos que impedía poder hacer las videoconferencias (los acusados se encuentran en prisión fuera de Asturias).