Señalan que la falta de visitas a los centros educativos está impidiendo a los inspectores conocer a los equipos directivos y proponer direcciones adecuadas
La Junta Directiva de la Asociación de Inspectores de Educación de Asturias (ADIDE-AS), que representa a más del 90% de los inspectores de la comunidad, junto con las secciones sindicales de UGT y USIE en el Principado de Asturias, han manifestado su preocupación respecto al modelo de inspección educativa que está implementando la Consejería de Educación.
Según los inspectores, “la improvisación y la urgencia han desplazado a la planificación y elaboración de planes educativos que respondan adecuadamente a las necesidades del sistema educativo”. Esto, afirman, está provocando un deterioro en la calidad del servicio que se ofrece a la comunidad educativa. Así, la asociación subraya la importancia del asesoramiento cercano, especialmente en momentos de cambios normativos. La Junta Directiva critica que el papel de los inspectores se esté limitando a funciones administrativas y de control del cumplimiento normativo, en lugar de adoptar un modelo pedagógico y de proximidad a los centros. «El mero cumplimiento de la norma no garantiza calidad educativa alguna», destacan, y señalan también la ausencia de planes que permitan un asesoramiento eficaz y la necesidad de un mayor apoyo y autonomía en la planificación diaria de los inspectores.
Por ello, la asociación destaca que la falta de visitas a los centros educativos está impidiendo a los inspectores conocer a los equipos directivos y proponer direcciones adecuadas. Piden así una revisión del modelo de inspección educativa actual, que permita a los inspectores tanto ejercer sus funciones establecidas en la normativa vigente, como supervisar el funcionamiento pedagógico, asesorar a los centros y fomentar la convivencia.