El ente nacional estima que la población del Principado mermará hasta alcanzar las 967.328 personas entre el momento actual y 2039, lo que equivale a una reducción del 4,1%
Como, a escala internacional, sucede con el cambio climático, el devenir político o las tensiones geoestratégicas, la preocupación en torno al futuro demográfico del Principado no acaba de mitigarse. Muy al contrario, cada vez más estudios confirman la inquietante tendencia a futuro del número de habitantes de la región. Y los últimos datos aportados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) no ayudan a tranquilizar los ánimos. Según su estudio de proyecciones de población, que muestra la evolución demográfica en el caso de mantenerse las tendencias actuales, y que se presentó este lunes, desde hoy y hasta 2039 Asturias podría perder 41.546 habitantes, pasando de los 1.008.874 que se contabilizaban a 1 de enero de 2024, a 967.328 en una ventana de quince años. En términos estadísticos, eso equivaldría a una merma del 4,1%.
Si bien la tónica de pérdida humana no es desconocida, los datos en cuestión han hecho saltar las alarmas de nuevo. No en vano, de acuerdo al contenido del documento, Asturias se sitúa como la comunidad autónoma que perderá más población de toda España, mientras que a nivel nacional se espera un aumento de la población de 5,12 millones de personas. Esta proyección estima un saldo vegetativo (nacimientos frente a defunciones) negativo en 2024 de -9,051, igualmente negativo en los años venideros: -8,866 en 2028; -8.802 en 2033 y –9.020 en 2038. Al mismo tiempo, sitúa a Asturias como la tercera comunidad por la cola respecto al saldo migratorio exterior por cada mil habitantes (74,9).
Una dinámica nacional ‘salvada’ por la inmigración
A nivel nacional, la migración elevará la población en España hasta los 54,6 millones de habitantes dentro de 50 años, en el año 2074. Según las proyecciones publicadas, en los 15 próximos años España ganaría 5.137.447 habitantes (un 10,6%), hasta superar los 53,7 millones de personas en 2039. Dentro de 50, en el año 2074, la población alcanzaría los 54,6 millones, con un incremento de 5,98 millones de personas. El INE especifica que el progresivo aumento de las defunciones, superior al número de nacimientos, daría lugar a un saldo vegetativo negativo durante todo el periodo proyectado. Este saldo vegetativo negativo sería superado por el saldo migratorio positivo en la mayor parte de los años del periodo proyectivo, lo que provocaría, en balance, un aumento de población. Al mismo tiempo, el estudio detalla que este aumento se debería, por tanto, exclusivamente, a la migración internacional. Por su parte, la población nacida en España disminuiría paulatinamente y pasaría del actual 81,9% del total al 61,0% dentro de 50 años.
Como indica el documento, España registró 1.258.894 inmigraciones en 2022, mientras que 531.889 personas abandonaron el país para residir en el extranjero. El saldo migratorio fue de 727.005 personas, el más elevado en 10 años. El INE proyecta un saldo migratorio similar en 2024 y decreciente a partir de ese año, con más intensidad en los primeros años, aunque siempre positivo por lo que obtiene una ganancia neta de población debida a migraciones de 3,5 millones de personas en los cinco primeros años proyectados y de 7,0 millones hasta 2038. En todo el periodo proyectivo, hasta 2073, sería de 17,1 millones de personas. Finalmente, por comunidades autónomas, la población crecerá en trece y bajará en cuatro de ellas en los quince próximos años, según esta proyección. Los mayores aumentos se darán en Baleares y Comunidad Valenciana (+19,0% en ambas) y los mayores descensos en Asturias (-4,1%) y Extremadura (-3,4%).
Un 8,7% menos de nacimientos que en los quince años previos
Por otro lado, la proyección del INE especifica que el número de nacimientos comenzaría a aumentar levemente en 2024 y seguiría creciendo hasta 2042. Sin embargo, entre 2024 y 2038 nacerían en torno a 5,5 millones de niños, un 8,7% menos que en los quince años precedentes. No obstante, a partir de 2058 los nacimientos podrían comenzar a aumentar de nuevo, debido a la llegada a las edades de mayor fecundidad de generaciones cada vez más numerosas. Pese a ello, los nacimientos siempre estarían por debajo de las defunciones. El número de nacimientos se proyecta suponiendo que la fecundidad de las mujeres mantenga una leve pero progresiva tendencia al alza. Así, el número medio de hijos por mujer sería de 1,24 en 2038, frente al 1,16 de 2022. La edad media a la maternidad se mantendrá en torno a los 32 años en los 50 próximos años: bajará de los actuales 32,50 años a 32,16 en 2042 y luego repuntará ligeramente hasta 32,3 años en 2072.
Respecto a la esperanza de vida al nacimiento, alcanzaría en 2073 los 86,0 años en los hombres y los 90,0 en las mujeres, con una ganancia de 5,6 y de 4,3 años, respectivamente, respecto a los valores actuales. Precisamente, la población centenaria (100 o más años) se multiplicará por doce en casi cincuenta años, al pasar de 18.312 personas en 2024 a 226.932 en 2072. Por su parte, la esperanza de vida para las personas con 65 años en 2073 sería de 22,7 años para los hombres (3,6 más que actualmente) y de 26,3 para las mujeres (3,3 años más). Las mujeres que cumplan 65 años en 2076 vivirán, de media, 26,3 años más (3,3 más que actualmente) mientras que los hombres vivirán 22,7 años más (3,6 más que ahora). Actualmente, el 20,4% de la población española tiene 65 o más años. Según las proyecciones del INE, este porcentaje alcanzaría un máximo del 30,5% en torno a 2055. A partir de ese año, el porcentaje bajaría levemente, hasta el 30,3% en 2074.
A pesar de la mayor esperanza de vida, el número de defunciones continuaría creciendo hasta alcanzar un máximo en 2065. Así, seguirá creciendo hasta 2064, al pasar de 436.325 en 2024 a 669.278. Tras unos años de leve bajada, en 2072 llegarían a un máximo de 693.390. En esta nueva edición de las proyecciones se dirigió una consulta en forma de encuesta a demógrafos de toda España con el fin de establecer las hipótesis de comportamiento futuro de los parámetros demográficos.