La falta de compradores interesados en el histórico edificio ha llevado a sus propietarios a mermar aún más el precio de venta, bajándolo del millón de euros solicitado inicialmente a los 699.000 pedidos en la actualidad

Son días de verano, días de descanso para muchos, días de calor para todos… Y, también, días de rebajas. Una oportunidad estupenda para hacerse con moda a bajo precio, con calzado de marca por un coste menos prohibitivo de lo habitual, con caprichos en otras circunstancias disuasorios… ¿Y, por qué no, con una casa? No con cualquiera, desde luego… Con un palacio de tres plantas en 690 metros cuadrados, levantado sobre una parcela de otros 1.780 metros cuadrados, dotado de casi cuarenta habitaciones, incluidos once dormitorios, cinco salones, nueve baños… Por no hablar de dos caballerizas y garaje, por supuesto. Esos son los requisitos más reseñables de los muchos que reúne la Casona de la Marquesa de Casa Valdés, propiedad hasta su muerte, ocurrida en 2019, de Beatriz Valdés y Ozores, suegra de la expresidenta de la Comunidad de Madrid Esperanza Aguirre… Y a la que las rebajas de la temporada estival también ha llegado. Incapaz de hallar un comprador para esa masiva vivienda, una de las más emblemáticas de Pravia, la familia política de Aguirre ha decidido ajustar aún más su precio, que llegó a superar el millón de euros en origen, y que, ahora, se sitúa en unos más ‘humildes’ 699.000 euros.
Aunque llamativo, este descuento no es, en absoluto, el primero que sufre el palacio. Este mismo mes de marzo quedaba constancia, a través del portal web de la empresa inmobiliaria M2, de una rebaja anterior, que situaba el precio en 799.000 euros. Y las reducciones se han ido encadenando a lo largo de estos cuatro y medio, dada la dificultad para encontrar a alguien interesado en abonar semejante cuantía. Una reticencia, por otra parte comprensible; más allá de lo elevado del, importe, quien se haga con la casona estará obligado a acometer diversas reformas, en absoluto baratas, y a cumplir con la estricta normativa que rige la supervivencia y el uso de un edificio de semejante valor histórico.