La reforma del Albergue se diseñó ‘codo con codo’ entre Foro y PP

La polémica por el traslado temporal del Albergue Covadonga al barrio de El Natahoyo sigue creciendo, y esta vez el fuego político llega desde dentro del propio Ayuntamiento. La portavoz de Vox Gijón, Sara Álvarez Rouco, acusó este martes a Foro y a la alcaldesa Carmen Moriyón de “negar la evidencia” y “mentir a los gijoneses” al intentar desvincularse de una decisión en la que según ella su partido tuvo participación directa.
Rouco respondió así a las declaraciones del portavoz municipal de Foro, Jesús Martínez Salvador, quien aseguró que su grupo “no va a hacer una valoración en caliente” sobre la protesta vecinal del lunes y subrayó que “no es una decisión tomada desde nuestro lado del gobierno”, en referencia a la Concejalía de Servicios Sociales, dirigida por el popular Guzmán Pendás.
Sin embargo, algunos hechos contradicen esta versión. Según recogía El Comercio en julio, el proyecto de la reforma integral “está siendo desarrollada codo con codo” por las concejalías de Infraestructuras, encabezada por Gilberto Villoria (Foro), y Servicios Sociales (PP). Es decir, Foro no solo estaba al tanto de la operación, sino que forma parte activa del plan.
“La alcaldesa y su equipo muestran un perfil lamentable”, afirmó Rouco. “Son gobierno con el PP cuando interesa e independientes cuando no. La Alcaldía consensuó este traslado y ahora intentan fingir que no sabían nada. A ver qué inventan para salir de esta”, añadió la portavoz, en unas declaraciones que reavivan la tensión entre los tres partidos del Consistorio.
El traslado del Albergue Covadonga responde a la necesidad de acometer una reforma integral del edificio actual. Durante los trabajos, las 55 personas con plaza estable en el centro —35 hombres y 20 mujeres— serán reubicadas en las antiguas instalaciones del Hogar de San José, en El Natahoyo. Según el concejal Pendás, se trata de un traslado “estrictamente temporal”, hasta 2028, y con “seguimiento exhaustivo y coordinación permanente con Seguridad Ciudadana”.
Pese a estas garantías, el malestar vecinal estalló el lunes durante la inauguración de la Capilla de San Esteban del Mar, convertida en nuevo centro cultural. Cerca de quinientas personas se concentraron frente al edificio con gritos de “Moriyón dimisión” y “Llévalos a Somió”. La protesta acompañó a la alcaldesa hasta la plaza del Marqués.