La delegada del Gobierno y exvicesecretaria general del PSOE realizó sus primeras declaraciones sobre el escándalo de corrupción desatado en el partido que salpica también al navarro; calificó de «una operación de acoso y derribo hasta que yo dimití enferma y embarazada de cinco meses y medio» el proceder del ya exsecretario de Organización hacia su persona

Fue ayer, antes de recoger el Premio Miradas Violetas de Movimiento Asturiano por la Paz en el ovetense Teatro Filarmónica, cuando, en declaraciones a la prensa, Adriana Lastra dio sus primeros pareceres sobre el escándalo de corrupción en el PSOE que salpicó el jueves al secretario general de Organización y diputado, ya dimitido, a partir de un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. «A mí Santos Cerdán también me engañó y me traicionó», aseguró la delegada del Gobierno en Asturias, que coincidió con el navarro en Madrid cuando ella ocupaba el cargo de vicesecretaria general.
Apuntó que, en su momento, también habría puesto la mano en el fuego por él, «porque yo lo último que me podía imaginar, y se lo digo con el corazón en la mano, es que Santos Cerdán estuviera involucrado en un caso de corrupción», y sobre la animadversión del supuesto corrupto hacia Lastra, que reflejan las conversaciones recogidas por la UCO, apunta que «sabía todo lo que me ha hecho durante todo este tiempo, sobre todo durante mi etapa en Madrid, pero no sabía por qué». Así, «no era por lo que yo supiera, porque yo evidentemente no sabía nada; era por lo que yo pudiera llegar a saber».
En ese momento, preguntada por los periodistas por lo que Cerdán le habría hecho, contestó que «de todo», algo que siempre atribuyó a una cuestión de «machismo» y de «no tolerar que una mujer estuviera por encima de él». «Fue una operación de acoso y derribo hasta que yo dimití enferma y embarazada de cinco meses y medio», completó.