Ambos inmuebles, ubicados entre la calles Don Quijote y Maestru Enrique Truan, estaban vacíos en el momento de los hechos; se desconocen los detalles, pero los vecinos afirman que, en uno de los casos, los ladrones accedieron a través de una ventana
De un tiempo a esta parte, las noticias referentes a asaltos a viviendas de Gijón parecen haberse convertido en un hábito… En las parroquias rurales del municipio, eso sí. Quizá por eso, y porque los últimos casos han tenido lugar en entornos urbanos, la noticia de los mismos ha llamado tanto la atención. Dos inmuebles unifamiliares, ambos situados en el barrio de Viesques, han sido víctimas de otros tantos robos en los últimos días, aprovechando la ausencia de sus respectivos propietarios y ocupantes. Por el momento, y pese a estar confirmados ambos casos, la mayor parte de los detalles no ha trascendido, y se ignora si, a estas alturas, ya se han cursado las respectivas denuncias en dependencias de la Policía Nacional.
Lo poco que se sabe, siempre a tenor del relato de los vecinos de la zona, es que los asaltos se perpetraron coincidiendo con los periodos vacacionales de sus dueños. Los bloques, de entre los más antiguos del barrio gijonés, se hallan en el trapecio que forma la confluencia de las calles Don Quijote, Compositor Enrique de la Viña y Maestru Enrique Truan; casualmente, a poca distancia del lugar en el que, el pasado febrero, una mujer semidesnuda y con varios hematomas en su cuerpo fue sorprendida bajando de un vehículo. El importe de lo sustraído no ha trascendido, aunque lo habitantes de la zona afirman que, al menos, en uno de los dos casos los cacos accedieron a la vivienda a través de una ventana. En cualquier caso, la noticia ha causado cierta inquietud en el área en cuestión, y los vecinos piden que se refuerce puntualmente la presencia policial para disuadir de nuevos intentos.