

La sala Bossa Nova del Acapulco se vistió de gala el pasado fin de semana. La cantante Tere Rojo festejó junto con ocho de sus compañeros de partitura, sus cuarenta años en la música.
Este es uno de los muchos actos que la conocida artista está realizando para conmemorar así su dilatada carrera, que comenzó en la Agrupación Artística Gijonesa. De hecho, la primera sorpresa de la fabulosa tarde que esperaba a Rojo, fue la inesperada llamada de nada más y nada menos que Luz Casal. La artista comenzó su carrera también en la agrupación gijonesa, así que no quiso perder la oportunidad de felicitar a su colega. Por mediación de un amigo de ambas, el bailarín Maxi González, le dio la sorpresa a la homenajeada, minutos antes de comenzar las actuaciones.

El acto que estuvo presentado por la periodista Montse Martínez, contó con el acompañamiento al piano por su incondicional Charly Blanco y comenzó con un tema que le gusta especialmente a la artista “Hoy canto por cantar”, y que representa de alguna manera, lo que significa la música para Tere Rojo.
No faltaron tampoco compañeros de profesión que intercambiaron canciones junto a ella, como Marta Álvarez, Alfredo Fradejas, Maite Álvarez, Belén Rodríguez, Joaquín, García y Ceferino Otero, además de los bailarines Mónica Lombardía y Diego Ramos. Por supuesto, Lía Marcos, la hija de la artista que sigue sus pasos con una voz impresionante, no se perdió la feliz jornada y entonó también un tema junto a su madre.
Este no será el último acto del cuarenta aniversario en las tablas de la cantante. Queda un último empujón a otra sorpresa que verá la luz, no tardando mucho.
Esperaremos.