El incidente, que no causó heridos, sí provocó retenciones importantes y obligó a desviar el tráfico en sentido Cantabria hacia la N-634
Podría haber sido un auténtico drama pero, por fortuna, sólo quedó en un espectacular susto. Y sin heridos, además, Ese fue el saldo del accidente que, en la tarde este lunes, protagonizaba un camión articulado cargado de arena en la A-8, la ‘Autovía del Cantábrico’, a la altura del punto kilométrico 290,5. Por causas que todavía se están investigando, el vehículo volcó y obstruyó el tráfico en los carriles que discurren hacia Cantabria, aunque su conductor salió ileso.
El accidente tuvo lugar alrededor de las siete de la tarde, y provocó importantes retenciones en dicha vía. En consecuencia, la Guardia Civil procedió a desviar el tráfico por la salida 291 hacia a N-634, volviendo a reincorporarse a la A-8 a la altura del kilómetro 285.