El hombre reconoce que actuó «fruto del alcoholismo»
El acusado de abusar sexualmente de su hija de 14 años en Valdés ha admitido este viernes los hechos que le atribuían la Fiscalía del Principado de Asturias y la acusación particular y ha aceptado una condena de dos años de prisión, entre otras penas y medidas, tras reconocer que actuó fruto de su alcoholismo. La vista oral estaba señalada en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial, con sede en Oviedo.
Según el escrito del fiscal, sobre las 19.30 horas de principios de junio de 2019, el acusado se hallaba en el estudio de fotografía que regentaba en el concejo de Valdés, cuando recibió la visita de su hija, de 14 años. En ese momento, comenzó a decirle que era «muy guapa», «una princesa», la sentó en sus piernas y empezó a realizarle tocamientos por debajo de la ropa, a pesar de que la niña le pedía que parase. A continuación, le pidió que fuesen a la parte de atrás del estudio con el pretexto de entregarle algo, la tumbó sobre un sofá y repitió la conducta anterior, hasta que recibió llamada de la madre de la menor para preguntarle si estaba con él.
La menor era una adolescente vulnerable, caracterizada por un estilo cognitivo rígido, inmadurez reflexiva, inteligencia límite por apreciación clínica y escasas habilidades sociales, circunstancias aprovechadas por su padre para cometer los hechos. Tras ellos, sufrió trastorno por estrés postraumático de intensidad leve. Tras reconocer los hechos, el acusado, con la conformidad de las partes, aceptó una condena de dos años de prisión, y la prohibición de aproximación a la víctima, a su domicilio, lugar de estudio o cualquier otro frecuentado por ella, a menos de 200 metros, y la prohibición de comunicarse con ella por cualquier medio, ambas durante 7 años.