El accidente ocurrió mientras el trabajador recogía agua para actuar sobre un incendio forestal en Sobrescobio tras tocar unos cables del tendido eléctrico, consiguiendo controlar la aeronave para hacer una suerte de amerizaje y salir nadando por sus propios medios

Pudo ser una tragedia, pero felizmente quedó en un susto. Un bombero piloto de helicóptero del Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA) cayó con la aeronave en el embalse de Tanes después de tocar unos cables de tendido eléctrico que sobrevuelan el mismo. Sucedió sobre las 17.50 horas de ayer, cuando se encontraba haciendo viajes para cargar agua con el objetivo de atacar un incendio forestal en Sobrescobio.
La habilidad del único ocupante del aparato hizo que, pese a la situación, pudiera amerizar el helicóptero para que el accidente no fuera fatídico. Tal fue así, que pudo salir nadando por sus propios medios, sólo con heridas leves, ante el susto de los vecinos que pudieron ver su trayectoria o escuchar un fuerte sonido. Uno de ellos fue el que dio aviso al 112 Asturias y comunicó que el piloto pudo llegar a la orilla.
A través de este alertante es como el SEPA pudo hablar con el accidentado. De inmediato se movilizó hasta la zona a los efectivos de Bomberos con base en el parque de San Martín del Rey Aurelio y al Grupo de Rescate a bordo del helicóptero medicalizado. Finalmente, fue trasladado por la ambulancia de soporte vital básico de la zona al Hospital Valle del Nalón.
El accidente provocó cortes de luz a los concejos del Parque Natural de Redes por unas horas. Alejandro Calvo, consejero de Movilidad, Cooperación Local y Gestión de Emergencias, se desplazó a la zona tras conocer el suceso.