Sindicato CGT: «Encarna tuvo que parar 16 minutos por un fuerte dolor a causa de la endometriosis que padece y de la que ya había avisado a la compañía»
Comité de Empresa: «Hay muchas mujeres trabajando y eso no se corresponde con la realidad»
Encarna Aznar, conductora de Bacoma Transportes -empresa perteneciente al asturiano Alsa Grupo– y actualmente de baja laboral desde el 21 de agosto, se enfrenta a un despido por parte de la compañía y ha iniciado esta semana movilizaciones en Almería, desde donde iniciaba su habitual ruta nocturna a Valencia, por lo que considera un “trato desigual” debido a su condición de mujer.
La empresa niega que exista “discriminación alguna por razón de género o cualquiera otro motivo” en el despido, y argumenta que está motivado “por faltas graves y muy graves como reiteradas reclamaciones de clientes ante el Servicio de Atención al Cliente, incluida una denuncia interpuesta por supuesto trato desconsiderado, hablar por el teléfono móvil mientras conduce y el incumplimiento de los protocolos establecidos para las paradas”. Asimismo, el comité de Empresa de Bacoma ha considerado el despido como “justificado”.
Este diario se ha puesto en contacto con el sindicato CGT, que está llevando el caso; con María Aznar, hermana de Encarna; y con Alsa Grupo, a fin de conocer los hechos en detalle. Sobre el incumplimiento del protocolo de paradas, que Bacoma alude como causa, Cristina García, de la secretaría de Mujer, Anarcofemenismo e Igualdad del sindicato CGT Andalucía, Ceuta y Melilla, afirma que en una de las dos ocasiones, producida hace unos meses, “Encarna tuvo que parar 16 minutos por un fuerte dolor a causa la endometriosis que padece y de la que ya había avisado a la compañía”. Advierte García que la endometriosis está reconocida como una “enfermedad crónica”, y que la parada “se realizó en un área de servicio y por seguridad del pasaje”.
Tras esa parada, que fue sancionada, se vuelve a producir otra no programada en junio. En esta ocasión. Encarna sufrió “somnolencia” (el trayecto es de madrugada), y paró “durante seis minutos”. Comenta la representante del sindicato que este tipo de paradas “están toleradas por la empresa y muchos compañeros las hacen y no les dicen nada, de hecho, es una práctica recomendada por la Dirección General de Trabajo”.
Otra de las causas del despido, según Bacoma, es que Encarna Aznar habló por el teléfono móvil “mientras conducía”, una acción considerada como muy grave. Este motivo, según ha podido consultar miGijón, se refiere a los hechos sucedidos el 8 de diciembre de 2022, que no fueron constitutivos en su día de la apertura de un expediente sancionador y que finalmente se quedaron en una carta de advertencia por parte de la compañía, en la que la acusaban de coger su teléfono móvil sin terminar de inmovilizar el vehículo.
Según la conductora: “Mientras circulaba recibí un mensaje de WhatsApp en mi móvil de parte de la técnico de la empresa. Una vez estacionada y tras al acabar el servicio, leí el mensaje. Acto seguido, llamé a la empresa, sin que la llamada fuera atendida. Al instante de iniciar la marcha con dirección a las cocheras, volví a recibir una llamada telefónica de la Técnica de Servicio, por lo que salí fuera de la vía haciendo un gesto para mirar la pantalla del móvil. En ese momento, y ya fuera de la vía y sin usuarios, se activó la drive cam del vehículo por el uso del freno de pie, y no del retarder del volante. Las imágenes de la cámara no recogen ni mucho menos a mi persona haciendo uso del teléfono móvil, pues no contesté a la llamada hasta que el vehículo no se encontró totalmente inmovilizado. La llamada entrante fue además realizada por personal de la propia empresa”.
Sobre la denuncia de un pasajero interpuesta por supuesto trato desconsiderado, que alude la empresa y que supuso una sanción que el juzgado de lo social de Almería consideró “desproporcionada”, la hermana de Encarna, María Aznar, recuerda que el incidente se produjo a raíz de que el tripulante, durante la pandemia, “se negó a poner la mascarilla”, lo que inició el protocolo de inmovilizar el vehículo y llamar a la policía. “El juzgado dio la razón a Encarna en sentencia firme”, afirma. El sindicato CGT también recuerda el trato desigual sufrido por Encarna en cuestiones “como discriminarla directamente sin descansar ni un sábado o domingo desde enero 2023 a diferencia del resto de sus compañeros, con la excepción de uno en mayo”.
Desde el Comité de Empresa de Bacoma, su presidente, Julio Martos, informaba esta semana a EFE que «aquí no se trata de defender a una mujer o a un hombre porque no hay discriminación laboral. Hay muchas mujeres trabajando y eso no se corresponde con la realidad», ha incidido.
Desde el pasado 28 de agosto y de lunes a viernes, Encarna y otros compañeros del sindicato se están manifestando por las mañanas en la estación intermodal de Almería. Se han hecho eco de su caso varios medios de comunicación, como el programa Todo es Mentira (Cuatro) o la televisión pública de Andalucía, Canal Sur.
Este martes, la concejala de Podemos Xixón en el Ayuntamiento, Olaya Suárez, comentaba los hechos sucedidos: «No tenemos los mismos derechos solo porque la Constitución lo dice, tal y como defienden algunos señoros. O los ejercemos o no existen. O los defendemos o no los tenemos, porque nadie nos va a regalar nada. Todo el apoyo y la solidaridad desde Xixón».
“No pueden humillar más a mi hermana”
Encarna Aznar, que acumula 18 años de experiencia, entró a trabajar en Alsa Grupo en 2014. Comenzó cubriendo vacaciones y bajas de compañeros y con contratos de seis meses. Hace un año la hicieron fija. En febrero de 2022 fue reconocida por el grupo por su “desempeño ejemplar y su excelente compromiso de conducir de forma segura”, tras reaccionar con diligencia y evitar un accidente cuando un pasajero, que se quería bajar en plena autovía, se abalanzó sobre ella y tomó el volante. En aquel momento, Encarna pudo estacionar en el carril de desaceleración.
La conductora forma parte de la sección sindical de CGT y siempre ha sido muy activa en las reivindicaciones por el cumplimiento de la legalidad en materia de retribuciones y salud laboral. Entre ellas, ha reclamado en varias ocasiones que el vacío y limpieza de la fosa séptica y del depósito químico de los autobuses debe hacerlo “el personal especializado y no los conductores, que ahora son los encargados de hacerlo por orden en la empresa”, como cuenta su hermana. La conductora, que se encuentra de baja por estrés laboral, está en tratamiento médico. “No pueden humillar más a mi hermana”, lamenta finalmente María.
El «por ser mujer» está trayendo y va a traer muchos pero que muchos problemas en el ámbito laboral. A ver quién contrata a una mujer, sabiendo que a la mínima te puede denunciar, y con ello poner automáticamente no solo a tu empresa, sino a tu persona y tu entorno, en el ojo público. Porque a estas alturas no importa si esta señora cogió o no el móvil mientras conducía, o si cumplió o no el protocolo anti-covid con un pasajero rebelde: lo único que importa es la idea de que se la despidió POR SER MUJER.