El pequeño, de nombre Izan y que padece diabetes, se fugó del hospital asturiano en la tarde del sábado, aunque ayer se informaba de que ya había sido hallado, sano y salvo
No hay angustia comparable a la de unos padres que, de la noche a la mañana, pierden el rastro de sus hijos. Una experiencia desesperante y nada deseable que, durante veinticuatro horas, sufrieron los familiares de Izan, el pequeño de trece años desaparecido del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) en la tarde del pasado sábado. Sin embargo, afortunadamente, este suceso tiene un final feliz; prácticamente un día después de la ausencia del pequeño, el domingo por la tarde, se notificaba su hallazgo, sano y salvo.
Tanto las autoridades como los propios allegados de Izan movilizaron todos sus recursos para dar con el menor, haciendo especial hincapié en las redes sociales. Según la descripción facilitada por sus familiares el niño, aquejado de diabetes, mide 1,58 metros, y vestía unas deportivas negras, un pantalón de chándal gris y una sudadera decorada con motivos de la serie de animación ‘Pokemon’. Los cercanos al pequeño confirman que varios particulares respondieron a la petición de ayuda.