La ciudad se ha despertado sumida en el desastre que han provocado las torrenciales lluvias caídas durante la madrugada, que han dejado calles embarradas, árboles encima de coches o locales inundados

La ciudad de Gijón vivía esta madrugada una oleada de lluvias intensas que dejaban, además de en la ciudad, según el Servicio de Emergencias del Principado de Asturias (SEPA), 124 incidentes en doce municipios distintos de la región. La mayor parte de estos incidentes, registrados a causa de este temporal inesperado, se registraron entre las 18 horas del domingo, 10 de septiembre, y las 8 horas de este lunes y la mayoría, estuvieron relacionados con inundaciones de bajos, garajes, viviendas o locales comerciales.
Todos los efectivos del Cuerpo de Bomberos de Gijón se movilizaron con la llegada de las intensas lluvias, para atacar todas las incidencias, que han sido desiguales en los distintos barrios de la ciudad, siendo unos, más afectados que otros. El temporal nos ha dejado imágenes de árboles encima de coches, vecinos achicando agua de sus domicilios, señales de tráfico partidas o antenas de televisión dañadas por las fuertes rachas de viento, entre otras cosas. También, muchos locales comerciales y negocios afectados.
Uno de esos negocios afectados ha sido el Grupo Novelec, empresa especialista en material eléctrico, telecomunicaciones, fluidos y climatización que se encuentra en el barrio de Santa Bárbara. Su gerente, Rubén Pérez, contaba en declaraciones a miGijón que «nos encontramos todos bien porque afortunadamente fue de noche y no se encontraba nadie dentro de la nave, pero hay muchos destrozos». Ventanas rotas, techos caídos y agua por todos los rincones de la nave es lo que se han encontrado esta mañana los trabajadores y el gerente de esta empresa.
«La tormenta ha hecho que la nave se inunde por completo de agua. Llevan desde las ocho de la mañana sacando agua y aún, no han acabado» cuenta Rubén Pérez. «Además, cayó una ventana hacia dentro de la nave y también, un trozo grande del techo. Afortunadamente tenemos seguros que lo cubrirán pero los destrozos han sido importantes» zanjaba el gerente.
Ramas, barro y algunos destrozos de poca gravedad son los que quedan visibles a estas horas en Gijón, una ciudad cuyos habitantes, vivieron una madrugada que recordarán siempre.