El mascarón de proa del equipo de Tierra Astur logra su sexto primer puesto tras un durísimo mano a mano con Reinaldo Belén, de la sidrería El Portal, y con Wilkin Aquiles, de La Montera Picona de Ramón, segundo y tercero, respectivamente
El rey no ha muerto… Pero sí ha vuelto. ¡Larga vida al rey! Porque, por sexta vez en su ya extensa carrera en sector de la hostelería, Salvador Ondó demostró este jueves que es el monarca absoluto de la sidra en la región. No en vano, el guineano se alzó ayer vencedor del Concurso de Escanciadores de Gijón, una de las citas imprescindibles de la Fiesta de la Sidra Natural que estos días alberga la ciudad, y piedra angular del XXXI Campeonato Oficial de Escanciadores de Asturias. Un logro innegablemente meritorio, que revalidó tanto su liderazgo como el del equipo Tierra Astur… Aunque, eso sí, por una diferencia muy reducida con respecto a sus inmediatos rivales: Reinaldo Belén, adscrito a la sidrería El Portal de Villaviciosa, y Wilkin Aquiles, archiconocido miembro del restaurante gijonés La Montera Picona de Ramón. No fue hasta los compases finales de la prueba, una vez comparados a conciencia los resultados de cada uno, cuando quedó sentenciado que, aunque por poco, los laureles eran para Ondó.
Fue una batalla intensa, seguida por los espectadores hasta el más mínimo detalle, ganada por la mínima y que dejó buen sabor de boca en aquellos que no pudieron ocupar el primer puesto. La forma de ‘romper’ el líquido contra el vidrio, la cantidad de sidra en el vaso, la espuma generada… Cada uno de los detalles que determinan que un culete sea perfecto proporcionaron a Ondó los 97 puntos claves para el triunfo, muy próximos a los 96,9 con los que Belén y Aquiles y Belén empataron. Eso sí, las tornas cambian si se toma en consideración la clasificación general de los distintos certámenes sidreros desarrollados este año. En dicha tabla, si bien Ondó retiene el, liderazgo, con 241 puntos, es Aquiles quien permanece segundo, con 217, seguido por Antonio Sorca, de El Portal, con 155, y por Jorge Vargas, de La Montera Picona, con 131.
No obstante, la categoría reina del certamen no fue la única que hizo arreciar los aplausos entre el público reunido en la plaza Mayor de la ciudad. De hecho, especialmente intensa fue la ovación que se llevó Isabel Padrón… Y por partida doble, además. Empleada en Las Bodegas de Anchón, esta joven gijonesa fue reconocida como Mejor Escanciador Local, en primer lugar, y como campeona en el apartado sub-25, confirmando que los veteranos como Ondó o Aquiles cada vez tendrán más difícil mantener sus posiciones ante la fuerte pegada de las canteras en formación. A esas alturas, el XXXI Concurso todavía reservaba una última alegría para los gijoneses: el de la concesión del premio a la Mejor Sidrería a La Montera Picona de Ramón.
Toda una motivación para la que será la siguiente gran cita de la Fiesta de la Sidra Natural: el intento de superar el Récord Mundial de Escanciado Simultáneo de Sidra en la playa de Poniente, a partir de las 18 horas.