La Guardia Civil detuvo al joven, de 23 años, durante un control rutinario, tras encontrar en su poder un paquete de la primera sustancia y dos de la segunda
‘Zombie Kush‘… ‘Deep Water Cultivators‘… A primera vista, ambos nombres podrían confundirse, por ejemplo, con los de dos videojuegos de moda. Nada más lejos de la realidad. Cada uno de esos anglicismos sirve de designación a otras tantas variedades de hachís; las mismas que, el pasado 4 de abril, le eran intervenidas a un joven de Avilés en un control rutinario hecho por la Guardia Civil en el término municipal de Navia. El sujeto, de 23 años, fue inmediatamente detenido, y puesto a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Luarca.
Según el relato facilitado por la propia Benemérita, sobre las 23 horas de ese día se dio el alto a un turismo que ocupaban dos personas. Mientras se estudiaba la documentación de conductor y acompañante, los agentes se percataron del fuerte olor que manaba del interior del coche. Por ello, se pidió a ambos que bajasen, y se procedió a realizar un registro superficial… Que no tardó en dar frutos. En poder del acompañante se hallaron dos paquetes de ‘Deep Water Cultivators’, nombre que hace mención a un tipo especial de hidroponía en la cual las plantas, en este caso el cannabis sativa, crecen con las raíces sumergidas en una solución fertilizante aireada; con ello se consigue un crecimiento más rápido, y cosechas de hachís más abundantes. Acto seguido, se encontró un tercer envoltorio, esta vez de ‘Zombie Kush’, variedad de cannabis muy resistente, de crecimiento muy rápido, con cogollos muy compactos y que no precisa muchos fertilizantes. El conjunto arrojó un peso total de 259 gramos.
La droga intervenida será remitida al Servicio de Farmacia-Control de Estupefacientes del Área de Sanidad y Política Social de la Delegación del Gobierno en Cantabria, donde se llevan a cabo los análisis de las sustancias estupefacientes.