Desde el SESPA han destacado el «privilegio» que fue para el hospital asturiano contar en 2011 con esta tecnología pionera que instaló Philips
El quirófano híbrido del Hospital de Cabueñes cumple diez años con un balance cercano a los 8.000 pacientes tratados y con la intención de seguir mirando hacia el futuro. La puesta en marcha de esta sala quirúrgica, que supuso la descentralización de muchos de los tratamientos y operaciones vasculares, situó a Gijón a la vanguardia, ya que Cabueñes fue el primer centro del país en disponer de esta prestación que incorpora dentro del quirófano equipos de angiografía vascular digital, específicamente diseñados para entornos quirúrgicos, permitiendo hacer cirugías y técnicas endovasculares a la vez.
El gerente del Área V SESPA, Manuel Bayona, ha destacado el «privilegio» que fue para el hospital asturiano contar en 2011 con esta tecnología pionera que instaló Philips. Además, ha insistido en el compromiso de seguir mejorando las prestaciones de cara al futuro. «Espero que en los próximos años podamos celebrar que Cabueñes sigue siendo motor y bandera de la innovación, de la alta tecnología, para acercarnos de manera más precisa a los pacientes»
En la rueda de prensa para conmemorar la instalación de este revolucionario quirófano ha participado, Eduardo Ros Die, catedrático Emérito de Cirugía Vascular de la Universidad de Granada y expresidente del Capítulo de Cirugía Endovascular de la SEACV, que ha recordado el punto de inflexión que supuso para los cirujanos vasculares. «Para la generación de cirujanos vasculares a la que yo pertenezco fue un hito muy importante porque sin duda alguna marcaba un antes y un después para el desarrollo de la especialidad»
La clave es su versatilidad
El quirófano híbrido es una única sala quirúrgica que integra la tecnología diagnóstica y terapéutica más moderna, lo que implica poder ofrecer a los pacientes un abordaje integral para sus problemas.
«Permite hacer la arteriografía diagnóstica, hacer toda la cirugía endovascular, seguir realizando la cirugía convencional abierta o hacer una cirugía combinada para que en un solo acto quirúrgico se de una solución al paciente», ha señalado el jefe de Servicio de Cirugía Vascular del Hospital Universitario de Cabueñes y principal impulsor de este quirófano, Javier Álvarez que acabó creando escuela en todo el país.
«Lo fundamental es la versatilidad, nos facilita hacer infinidad de intervenciones que antes teníamos que hacer parcialmente en distintos momentos y tomar decisiones posteriores a la realización de pruebas. Además, nos permite realizar el diagnóstico y aplicar terapias en el mismo momento, en caso de que sea necesario», ha explicado el presidente de la Sociedad Española de Angiología y Cirugía Vascular (SEACV), Valentín Fernández Valenzuela, durante su ponencia.
Otra de las ventajas que supuso en su momento fue la mejora significativa de la calidad de imagen sin tener que aumentar la dosis de radiación. «Philips se preocupa también de la dosis de radiación, con su corte de rejilla no solo vemos que disminuye la radiación dispersa sino la dosis total sin disminuir la calidad de imagen. Esto es muy importante no solo para el paciente sino también para el equipo quirúrgico», ha puntualizado el jefe de Servicio de Cirugía Vascular del Hospital Universitario de Granada, Miguel Salmerón.