«Las almas antroxeras que forman parte de esta gran familia, no defraudaron. Se dejaron el alma, ¡bueno! y si me apuran, las piernas, los brazos, la voz…el todo»
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Y llegó el gran momento del desfile antroxero y gijonudo, post pandémico. Ya se sabía que había ganas, pero ¿tantas? Ayer los gijonudos, en el más amplio sentido de la palabra, se echaron a la calle en busca de magia, luz y color. Las almas antroxeras que forman parte de esta gran familia, no defraudaron. Se dejaron el alma, ¡bueno! y si me apuran, las piernas, los brazos, la voz…el todo.
Abrió la espectacular serpiente multicolor la Sardina acompañada de su amiga Conchi y el gran Parrochu, que vuelve a ocupar su sitio, sobre todo por antigüedad.
Eran las siete y media de la tarde, con cielo despejado y siguiendo la estela dejada por “Sardi” aparecieron más de una veintena de pitonisas, con mesa y bola incluida. Eran Perdíos de los nervios. A partir de ahí, los Cruzaos de Ceares, Los Mazcaraos, Los Acoplaos, Folixa pa toos, La Última y marchamos, Os Braileiros do Xixón, Kop’a Vino, Los Gijonudos, Los Restallones, Los Tardones y Xareu nel Ñeru.
Todas impresionantes en trabajo y entrega por y para nuestro antroxu. ¡Gracias!
No fueron los únicos. Aunque este año, por cuestiones de seguridad ante el covid, no desfilaron carrozas de clase A y B, sí hubo artilugios de arrastre. Se pudo ver a toda una faraona en su trono; una lámpara maravillosa que portaba un genio de lo más gamberro; un faro espectacular del grupo de la sociedad de Festejos de Castiello que nos embarcaron con sus chalanas en nuestro mar Cantábrico; la agrupación Cuatro Amigos hizo un guiño a Escocia; la AFA Montedeva, volvió a las calle (ya se había lucio el pasado domingo en el desfile infantil) con más de una treintena de Mary Poppins de todas las edades a las que, por cierto, les vino al pelo los paraguas ya que a esa hora comenzó a llover. La suerte fue que solo se contaron cuatro o cinco gotas.
Siguiendo con los participantes encontramos a La Guaxa, o el Club de la Amistad, que centraron su desfile en los más pequeños, con la fábrica de chocolate los primeros y los payasos de la tele, los segundos. O los Charly Chaplin y los arlequines de Enredas y de la Asociación Juvenil San Nicolás.
Cerramos desfile recordando el paso de la Asociación Mar de Niebla, que inundó buena parte de él humor y solidaridad que les caracteriza. Hoy se cierra el Antroxu despidiendo a Sardi, que ha muerto tras tropezar con sus madreñas.