Canteli busca la unidad con Gijón para lograr la Capitalidad Europea de la Cultura 2031. Su propuesta incluye a todos los municipios asturianos, fomentando un proyecto colectivo que resalte la diversidad cultural regional y promueva la cooperación intermunicipal

El alcalde de Oviedo, Alfredo Canteli, se reunió con la alcaldesa de Gijón, Carmen Moriyón, con el fin de sumar a Gijón al proyecto para que Oviedo sea designada Capital Europea de la Cultura en 2031. Este gesto subraya la voluntad de Canteli de superar las barreras municipales y construir una candidatura que represente no solo a la capital, sino a toda la región. La propuesta no se limita a solicitar apoyo, sino que busca generar un frente común entre los municipios asturianos: “Ser Capital Europea de la Cultura no solo implica a Oviedo, implica a Asturias”. Canteli dejó claro que, además de los recursos económicos, la iniciativa busca incluir proyectos culturales que enlacen diversas ciudades de la región. El objetivo es crear actividades y eventos compartidos que reflejen la diversidad cultural asturiana y conviertan la candidatura en algo más que una mera representación local.
La reunión entre los alcaldes, que sorprendió a algunos, forma parte de una estrategia más amplia del regidor ovetense para tejer consensos con otros municipios, un hito en la relación cultural entre las dos ciudades. Tras el encuentro en Gijón, Canteli planea continuar con visitas a otros concejos asturianos como Avilés, Siero y Mieres, con el fin de integrar a más municipios en un proyecto colectivo que refuerce la propuesta. La clave del éxito, según Canteli, es el trabajo conjunto: «Queremos que todos sumemos, que cada municipio aporte su visión».
Gijón, que previamente había trabajado en su propia candidatura, había pausado este proyecto tras el cambio de gobierno en 2023. El ejecutivo de Carmen Moriyón decidió abandonar la iniciativa, citando la falta de un proyecto concreto y el elevado coste de la candidatura como principales motivos. Sin embargo, Canteli ha visto en esta decisión una oportunidad para integrar las fortalezas de Gijón en la candidatura ovetense. El alcalde subraya que no hay espacio para la competencia innecesaria entre municipios, sino que busca una colaboración intermunicipal que refleje la riqueza cultural del Principado. En este sentido, Rodolfo Sánchez, coordinador del proyecto, aseguró que la respuesta de Gijón ha sido positiva y que seguirán trabajando en la integración de más municipios asturianos.
El desafío no será sencillo: Oviedo competirá con otras ciudades españolas como Granada, Cáceres, Toledo y Pamplona, todas con proyectos sólidos para ser la próxima Capital Europea de la Cultura. El proceso de selección está en marcha y las ciudades interesadas deben presentar sus propuestas antes de finales de 2025. En 2026, un comité de expertos de la Unión Europea llevará a cabo una preselección, que determinará las ciudades finalistas. Este panorama competitivo subraya la importancia de un proyecto colectivo que integre la diversidad cultural de Asturias, algo que desde el Ayuntamiento de Oviedo tienen muy claro.
El respaldo del Gobierno del Principado será clave para el éxito de la candidatura: ya se han comprometido 200.000 euros para apoyar el proyecto en 2025, lo que proporciona a Oviedo una base sólida desde el punto de vista institucional. Durante la presentación en Fitur, la vicepresidenta del Principado, Gimena Llamedo, reafirmó este compromiso.
La labor del equipo técnico que acompaña a Canteli también es fundamental para dar forma a la propuesta. Liderados por Pepe Mompeán y Natalia Álvarez Simó, estos profesionales continúan realizando reuniones sectoriales con actores culturales y sociales de Oviedo y su entorno, con el fin de enriquecer la candidatura con ideas frescas y variadas. Estos encuentros forman parte de un proceso participativo que asegura que la candidatura refleje las aspiraciones de toda la comunidad.
Canteli apuesta por un proyecto colectivo, donde la cultura se convierta en el motor de cambio y cohesión social para toda Asturias. Con el apoyo de otros municipios y la fuerza de un equipo técnico y político comprometido, la candidatura a la Capital Europea de la Cultura 2031 podría ser mucho más que un reconocimiento a una ciudad: sería el reflejo de un esfuerzo compartido que ponga a Asturias en el centro del mapa cultural europeo.