«Quedan muchos animales por adoptar en el Albergue de Serín, muchos de difícil adopción por su tamaño y edad», dice la concejala de Salud Animal
«Entiendo que el anteproyecto de ley debe enriquecerse todavía con nuevas aportaciones y debates»
La concejalía de Salud Animal del Ayuntamiento de Gijón ha aprovechado la celebración el pasado fin de semana de Espacio Mascotas, la feria más importante de la región, como altavoz de sus mensajes para la ciudadanía. La edil del ramo, Carmen Saras (Gijón, 1973), explicó las últimas iniciativas que se están llevando a cabo en una ciudad en la que el número de mascotas, por encima de 40.000, supera al número de personas menores de edad.
¿Cómo suma un escaparate como Espacio Mascotas a la hora de comunicar a la ciudadanía?
Organizada por la Cámara de Comercio de Gijón, Espacio Mascotas es la feria de referencia en Asturias. Siempre hacemos coincidir nuestra campañas con la feria porque así llegan a muchísima gente, y nos ayuda en ese efecto multiplicador tan necesario, y poder trasladar todos los mensajes que desde el Ayuntamiento y desde el equipo de Gobierno queremos trasladar a la ciudadanía.
¿Cómo valora la respuesta de los gijoneses a estas campañas?
Estamos muy contentos con la actitud de los gijoneses. Por ejemplo, ha subido mucho el número de felinos chipados (de 3.386 a 4.570). Gran parte de la campaña del chipado ha calado en la sociedad. Sin embargo, tenemos una pequeña asignatura pendiente con la recogida de excrementos y limpieza de orines. Siempre señalando que con el número de canes (37.394) los que incumplen son muy pocos, apenas un 1%. ¿Cuál es el problema? Ese uno de cada cien que no cumple ensucia lo bien que lo hacen los otros 99. Es muy visible. Cuando hay un excremento en la acera no se piensa en los otros 20 dueños que han pasado por la misma vía con sus mascotas y han tenido un comportamiento cívico.
Pese al elevado número de mascotas en la ciudad, más de 40.000, apenas constan 3 denuncias sobre maltrato en la ciudad desde 2018. ¿Por qué es necesaria una campaña como ‘Si pasa, no pases’, que presentáis este año?
Necesitamos que la gente denuncie ante el maltrato o cualquier sospecha de envenenamiento, y que las autoridades analicen si ha habido delito o no y, si es preciso, judicializar el caso.
‘No compres, adopta’, sigue siendo otro de los grandes lemas de su concejalía.
En el Albergue Municipal de Serín se están produciendo muchas adopciones y estamos muy contentos. Hay un gran número de ciudadanos que dicen que si tuvieran mascotas subirían a buscarlas al albergue. Quedan muchos animales allí, muchos de difícil adopción por su tamaño y edad.
¿Considera suficiente las zonas para perros de la ciudad? La nueva reordenación trajo muchas críticas.
Sí. Ahora mismo hay 42 zonas para perros. Aunque en la reordenación que se hizo se perdieron metros, eran de poca calidad. Había parques pequeños, como el de Carlos Marx, con una vía de circulación de cuatros carriles y al lado de un parque infantil con todo lo que eso conlleva. Ahora los espacios tienen los requisitos necesarios para el paseo y el juego.
¿Cómo afectará el anteproyecto de ley de Protección y Derechos de los Animales a los gijoneses?
Estamos a la espera. Implica nuevas obligaciones para el Ayuntamiento y el Principado. Traería cambios y centralizaría algunos datos, como el registro de personas inhabilitadas para tener cualquier tipo de mascota. Pretende introducir novedades como cursos de formación necesarios para los dueños y propone cambios en la ley de Perros Potencialmente Peligrosos (PPP). Desaparecería la caracterización por razas e introduciría una caracterización más específica en el estudio de cada animal por parte del veterinario. Se analizaría no solo su fisonomía, si no también su sociabilidad, y tendríamos unos criterios muchos más determinantes para ser PPP o no. En Espacio Mascotas hemos visto la exposición del American Bully, considerado PPP por su fisonomía, cuando se trata de una raza tranquila. Entiendo que el anteproyecto debe enriquecerse todavía con nuevas aportaciones y debates.
Por: Agustín Palacio