La Guardia Civil mantiene investigaciones sobre otras dos por un total de ocho hurtos, que provocaron daños por valor de 525.000 euros y retrasos en la apertura de nuevas líneas
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El tráfico de cobre robado en la región ha sufrido un nuevo duro golpe por parte de las fuerzas del orden. La Guardia Civil ha detenido a tres personas, e investiga a otras dos, como supuestos autores de un total de ocho delitos de hurtos de material de cobre de las instalaciones ferroviarias que Adif opera entre Gijón y Laviana. Las investigaciones dieron comienzo en el mes de marzo, tras conocerse una serie de sustracciones y juntas, mayoritariamente entre las localidades de Bendición y Carbayín.
Tanto el volumen del material sustraído, como los lugares donde se producían, indujeron a sospechar a los investigadores de la posible implicación de personal laboral de la empresa subcontratada por Adif para realizar los trabajos de renovación de la línea. A pesar del refuerzo de las vigilancias, en las que intervinieron no sólo patrullas de Seguridad Ciudadana, sino también efectivos de la USECIC (Unidad de Seguridad Ciudadana de Comandancia), los delitos proseguían, lo que reforzó esa primera hipótesis. Otro obstáculo en las investigaciones fue el notable retraso con el que las denuncias llegaban, ya que se presentaban a través de la central en la ciudad de León, retrasando el conocimiento de esos hechos y dificultando, por tanto, el seguimiento del rastro del material sustraído.
Las consecuencias no se hicieron esperar. Entre ellas estuvo el que que la inauguración de la línea, tras las reformas, no se pudiera llevar a cabo en las fechas previstas. Sin embargo, el 15 de mayo se tuvo conocimiento de que en un centro de gestión de residuos de material metálico de Gijón se habían vendido varios metros de cable de cobre que, una vez examinados, procedían de Adif. A este hallazgo siguieron otros, todos ellos en centros de gestión similares, aunque en los municipios de Langreo y de Siero. En total, se detectó la venta de 2.736 kilos de cable de cobre y baterías. Estos hallazgos permitieron seguir la pista a los vendedores del material, confirmando que era personal trabajador de las empresas contratadas por Adif. En este punto, se pudo detener a tres sospechosos, e investigar a un cuarto.
A este ‘modus operandi’ se unía otro más habitual, que se produjo el 23 de abril entre las localidades de Bendición y Valdesoto. Ese día cuatro personas fueron sorprendidas portando unas bolsas sospechosas de contener material sustraído; cuando se les dio el alto, emprendieron la fuga a través del monte. Tras recorrer la zona, se pudo comprobar que entre los kilómetros 590 y el 650 de la línea férrea había hilo sustentador y trozos del mismo cortados en el suelo, valorando este material y los daños causados en algo más de 12.000 euros. Por suerte, uno de los autores fue identificado e investigado, tratándose de un vecino del municipio de San Martín del Rey Aurelio, de 39 años de edad.
Concluidas las investigaciones, el balance final es el esclarecimiento de un total de ocho hurtos llevados a cabo entre los meses de marzo y mayo, en los que se sustrajeron un total de 2.736 kg. de cobre, juntas inductivas y baterías por un valor además de los daños causados de más de 525.000 euros. Las diligencias realizadas fueron entregadas en el Juzgado de Guardia de Pola de Siero.