Le acusan de apropiarse de piezas de cobre de un peso aproximado de 350 kilos, valorado en unos 2.000 euros
Agentes de la Policía Nacional han detenido a un hombre de 38 años, vecino de Gijón, por la sustracción de varias piezas de cobre valoradas en unos 2.000 euros, en la empresa en la que trabajaba.
Según una nota de prensa de la Comisaría gijonesa, el propietario de una empresa metalúrgica denunció la sustracción de diferentes piezas de cobre, utilizadas para la fabricación de piezas de electrólisis, arrojando un peso aproximado de 350 kilos. Las piezas habían ido desapareciendo en distintos días, en diferentes zonas de la nave y sin causar daños o forzamientos en los accesos a la empresa.
Fruto de la investigación, se pudo determinar que las mismas habían sido vendidas a terceras personas en establecimientos dedicados a la compra-venta de metales, lo que estrechó el cerco sobre el trabajador ahora detenido. El arrestado, que carecía de antecedentes policiales, según parece se encontraba pasando por un mal momento personal y reconoció la autoría de los hechos.
A otros que «sustraen» mucho más, no sólo no les detienen si no que les pagan mucho más…