En el primer caso el fuego devastó el salón del inmueble, y en el segundo, las llamas se cebaron con el tejado, aunque no se registraron heridos en ninguno de ambos sucesos
Dos incendios en una noche. Localizados, además, en dos puntos de la región separados por más de 115 kilómetros. Ese es el saldo que la pasada madrugada ha dejado para los Bomberos del Principado (SEPA), obligados a atacar dos incendios desatados en otras tantas viviendas de Porrúa y en Pola de Lena. Por fortuna, los daños han sido puramente materiales en ambos casos, y no se registraron heridos de consideración alguna.
Fue en esa segunda localidad donde se produjo el primer suceso. A las 0.33 horas el Centro de Coordinación de Emergencias recibió el aviso de que una casa de una sola planta, próxima al parque infantil de Pola de Lena, se estaba quemando. De inmediato se movilizó a siete efectivos de Bomberos del SEPA de los parques de Mieres y La Morgal, que se trasladaron con la autoescalera, el vehículo primera salida, la autobomba forestal y un vehículo nodriza. Una vez en la zona, los bomberos comenzaron las labores de extinción, dando por controlado el incendio a las 3.25 horas. A lo largo de la madrugada y de esta mañana los efectivos han seguido realizando tareas de revisión y vigilancia.
Por su parte, en Porrúa, población de Llanes, la alarma saltó a las 6.12 horas, cuando se detectó que un incendio estaba consumiendo un inmueble de dos plantas. En su caso, acudieron los bomberos del parque llanisco, que se trasladaron con el vehículo primera salida y el camión nodriza. Una vez en el lugar, los bomberos comenzaron a sofocar las llamas, dando el incendio por controlado a las 6.56 horas. Como resultado, el salón de la vivienda quedó totalmente calcinado, y otras partes de la casa resultaron afectadas. Los efectivos realizaron tareas de desescombro y ventilación, y se dio por finalizada la intervención a las 7.55. A lo largo de la mañana los bomberos volvieron a revisar el inmueble.