De forma inmediata se estableció un dispositivo policial para concertar una cita con el vendedor y comprobar si tenía en su poder los efectos sustraídos
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Gijón a dos jóvenes de 18 años de edad acusados de ofertar on line una videoconsola que acababan de sustraer. Según una nota de prensa de la Comisaría gijonesa, los agentes pudieron recuperar otros efectos sustraídos que los detenidos tenían previsto subir de forma inminente a la aplicación de venta entre particulares.
La investigación se inició con la denuncia de una mujer que daba cuenta de la sustracción de la mochila de su hijo, que había dejado en un banco de la calle Subida al Cerro, mientras estaba patinando en la pista de skate. La mochila contenía, entre otros efectos, una videoconsola con tres juegos y dos tablets, efectos cuyo valor ascendía a más de 1.000 euros.
En el momento de interponer la denuncia, la mujer se percató de que un usuario acababa de ofertar la videoconsola y los juegos sustraídos en una aplicación de venta entre particulares, por lo que de forma inmediata se estableció un dispositivo policial para concertar una cita con el vendedor y comprobar si tenía en su poder los efectos sustraídos.
Los policías corroboraron que los jóvenes que acudieron a la cita para materializar la venta llevaban consigo la videoconsola sustraída al hijo de la denunciante, por lo que fueron detenidos como supuestos autores de un delito de hurto. Los arrestados, en un primer momento, negaron ser los responsables de la sustracción y se excusaron diciendo que se la consola se la habían comprado a un indigente en las inmediaciones del Albergue Covadonga, por lo que no podían aportar ningún dato sobre el destino del resto de efectos sustraídos.
La Policía localizó, en cambió, las tablets en el domicilio de los detenidos, que las tenían preparadas para subirlas a la misma aplicación de venta entre particulares, lo que tenían previsto hacer una vez que hubieran conseguido vender la videoconsola. Uno de los detenidos, de 18 años de edad y vecino de Gijón, tenía una detención anterior por un robo con violencia.