Desde el PSOE alertan de la pretensión del Gobierno de modificar los estatutos de la empresa municipal para dar cabida al exedil de Vox Oliver Suárez como presidente

Sea al gusto de todos o no, la nube de la incertidumbre que orbita sobre la situación de Divertia ya tiene fecha de posible disipación. El Gobierno local tiene previsto convocar para la semana próxima la Junta General de la empresa municipal para la constitución de su Consejo de Administración. Un encuentro en el que se tratará de arrojar la luz definitiva sobre la situación de su presidente, Oliver Suárez, edil de Vox hasta su salida del partido hace apenas un mes. En ese sentido, está prevista una modificación de los estatutos del ente público, algo que ha hecho saltar las alarmas dentro del grupo socialista, desde el que consideran que semejante maniobra no es sino un intento del Ejecutivo de Carmen Moriyón de apuntalar su poder «apoyándose en un tránsfuga».
Tras el paso de Suárez a concejal no adscrito, el partido de Santiago Abascal pierde uno de sus dos representante en el Consejo, y se queda con sólo uno. Cabe recordar que la portavoz de Vox, Sara Álvarez Rouco, única edil de este grupo municipal en la actualidad, no puede ejercer de consejera por incompatibilidad con su cargo de diputada regional, por lo que ha nombrado a otro representante. Así mismo, la secretaria municipal del Ayuntamiento ya dictó un informe en el que confirmaba la condición de consejero de Suárez, al ser nombrado por Resolución de Alcaldía presidente de Divertia. Este hecho ha propiciado un Pleno extraordinario, que se celebrará el próximo día 6, a petición de los grupos municipales de PSOE, Izquierda Unida y Podemos, con el que buscan también esclarecer si Suárez es un «tránsfuga». Sobre este aspecto, el mismo informe de la Secretaría Municipal ya acotó que «se trata de un concepto no legal, sino ético», y producto de un acuerdo entre partidos políticos.
«Es un alarde de falta de prepotencia y de transparencia», critican desde el PSOE
Nada de esto, empero, ha convencido a las filas socialistas. Su concejala Marina Pineda comparecía esta mañana ante los medios para advertir de que la modificación de estatutos de Divertia, anunciada en la Junta de Portavoces de este jueves, «sólo pretende garantizar la mayoría del Gobierno en la empresa apoyándose en el tránsfuga ultraderechista», además de excluir a entidades de hostelería y turismo del Consejo. Para el PSOE, este es el primer paso para cambiar la composición acordada por el Pleno y reducir a un solo miembro la representación de Vox en el Consejo de Administración, en lo que Pineda ha calificado de «un alarde de falta de transparencia y prepotencia». Más aún, para ella «el Gobierno de Carmen Moriyón se escuda en criterios técnicos para justificar lo que realmente son decisiones políticas, y romper las reglas democráticas».
Pineda ha explicado que, hasta ahora, ocho de los miembros eran designados con la proporcionalidad establecida en el acuerdo de organización aprobado por el Pleno; en cambio, lo que se pretende ahora, según ella, es que sea la Junta de Gobierno la que determine a quién van a representar esos ocho miembros. «Lo han anunciado sin aportar ningún tipo de documentación y evitando, una vez más, el debate serio y riguroso ante un caso de transfuguismo», ha planteado la edil, lo que vendría a confirmar que el objetivo último no es otro que «justificar la anómala situación del tránsfuga ultraderechista Oliver Suárez». A modo de alternativa, ha propuesto que la distribución de los miembros del Consejo de Administración responda a la proporcionalidad que se acuerde en el Pleno municipal, y no que sea la Junta de Gobierno la que decida el reparto.