La entidad se ha decantado por el contencioso administrativo para tratar de revocar la inadmisión de su anterior recurso, mientras aguarda una reunión con el nuevo gobierno local, en la que tienen puestas «muchas expectativas»
La guerra abierta entre el Real Grupo de Cultura Covadonga (RGCC) y el anterior ejecutivo gijonés por la proyectada renaturalización del entorno del río Piles, en detrimento de la práctica del piragüismo en sus aguas, parece lejos de llegar a su fin. Muy al contrario, desde la entidad se ha dado a conocer hace pocas horas, a través de su cuenta de Instagram, que se ha recurrido la inadmisión del anterior recurso de casación presentado para tratar de frenar la supresión del anillo navegable, optando esta vez por la fórmula del contencioso administrativo. La medida, no obstante, ha sido forzada, según la directiva del club, por la necesidad de «salvar el plazo de recurso»; su confianza ahora está puesta en que la nueva corporación se avenga a reunirse con ellos para tratar de solucionar una tensión que acumula varios años de discusiones, diferencias y acusaciones mutuas.
«El Grupo está a la espera de mantener una reunión con el nuevo equipo de gobierno, a la que todavía no ha sido convocado, pero en la que se tienen depositadas muchas expectativas ante el compromiso de devolver la práctica del piragüismo al Piles», han reconocido los responsables de la entidad. A mayores, mediante la misma publicación en Instagram se ha anunciado que el Consejo de Transparencia ha estimado la reclamación presentada por el Grupo «ante la reiterada denegación de la concejalía de Medio de Ambiente del anterior gobierno municipal» a dar acceso al expediente que, en su momento, se tramitó para lograr que la planeada restauración de ecosistemas fluviales fuese subvencionada mediante fondos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia nacional.