
La alcaldesa de Gijón, Ana González (PSOE), ha hecho valer este miércoles su experiencia como docente para hacer un repaso sintáctico a la iniciativa plenaria de Vox contra el uso del lenguaje inclusivo en la Administración, en la que ha dicho haber encontrado numerosos errores que ha ido desgranando.
«Si corrigiera pruebas de EBAU, no aprobaban», les ha señalado, no sin antes afearles que no cumplen las normas de la Real Academia de la Lengua en su escrito, ni siquiera en el nombre de su partido, pero hacen uso de ella «en lo que les interesa y conviene». Así lo ha señalado en la sesión plenaria en la que no ha salido adelante la proposición de Vox en favor del lenguaje normativo y académico en la administración municipal de Gijón, rechazando la imposición del lenguaje inclusivo. Solo Vox y PP han votado a favor, mientras que Ciudadanos se ha abstenido y el resto han votado en contra.
González, incluso, ha incidido en que Vox defiende una ideología que niega la igualdad entre mujeres y hombres y les molesta la visibilización de esa desigualdad, como es el caso de lo que hace el lenguaje inclusivo. La regidora gijonesa ha hecho lectura a un informe sobre el sexismo en el lenguaje en el que queda reflejada esa desigualdad, como es por ejemplo el uso de tópicos que la denigran.
A mayores, ha rechazado que sea verdad que no admita el lenguaje inclusivo la RAE. Es más, ha sostenido que los desdoblamientos de género no son agramaticales e incluso señala que el riesgo de ambigüedad con ellos es «mínimo». Algo que, según la alcaldesa, aparece en la última gramática normativa.
«Bromas las justas en términos de igualdad»
«Las bromas las justas en términos de igualdad», le ha recalcado a la edil de Vox Laura Hurlé, que ha empezado su intervención con un uso irónico del lenguaje inclusivo. A esta le ha señalado que se basen en la RAE para su iniciativa y su texto luego está «lleno de incorrecciones». Le ha indicado, además, que su partido se llama Vox, cuando la forma castellana y aceptada por la RAE es ‘voz’.
A esto le ha seguido una retahíla de incorrecciones, como el que escriban mal hasta la dirección postal, que escriban con mayúscula Lengua Española, que separen sujeto y predicado, que no haya concordancia entre sujeto y verbo o que falten tildes en palabras esdrújulas, entre otras cosas. «Un auténtico atentado contra la norma», ha definido el escrito de la iniciativa de Vox.
Al margen de ello, ha indicado que aunque su uso pueda ser más minoritario, la opción de desdoblar el género en el lenguaje forma parte de la libertad. En respuesta, Hurlé ha tirado de ironía y ha agradecido a la alcaldesa «la clase magistral». Ha reivindicado, eso sí, que Vox está «absolutamente» a favor de la igualdad entre hombres y mujeres.

«Nos estamos cargando nuestro idioma con esta estúpida estética«, ha sostenido la edil, quien ha asegurado que la Real Academia
de la Lengua se ha posicionado en contra del lenguaje inclusivo. Ha pedido, a mayores, no adoctrinar a funcionarios con un lenguaje de marcada ideología feminista, a su juicio. En cuanto al uso del lenguaje inclusivo, se ha mostrado a favor de la libertad, sin tener que soportar imposiciones lingüistas. A Podemos-Equo Xixón, le ha indicado incluso que siendo un grupo municipal de una mujer y dos hombres, hablan siempre en femenino, por lo que no hacen un uso correcto del lenguaje.
Una afirmación que ha tenido respuesta en el edil de la coalición morada y verde, Rufino Fernández, quien sustituyó en el cargo a la que era portavoz municipal, Yolanda Huergo, tras su fallecimiento. «Utilizo femenino como homenaje a una compañera a la que no creo que llegue a estar a la altura», ha apuntado, quien ha dejado claro que el lenguaje inclusivo es una lucha de conquista que van a defender desde su grupo municipal.
«La gramática no es sexista, lo que es sexista es su uso»
En el caso de Ciudadanos, el edil Rubén Pérez Carcedo ha indicado que no comparte que la RAE rechace el lenguaje inclusivo. «La gramática no es sexista, lo que es sexista es su uso», ha señalado. Al tiempo, ha criticado que la intención de la propuesta de Vox es solo «polemizar y crispar».
También Foro ha afeado a Vox su «dogmatismo» de usar la RAE a su conveniencia y le ha recriminado el buscar problemas donde no los hay. Por su parte, el PP ha considerado que se puede hablar con visibilización de todos los géneros, sin transgredir el idioma. «El español no es una lengua sexista, no hace invisibilización del género», ha defendido.
Por contra, la edil ‘popular’ ha opinado que el lenguaje inclusive sugiere una rivalidad entre géneros que no existe, con una batalla del lenguaje ficticia que es «maniobra de distracción» de otras más importantes como la brecha salarial.