El Principado de Asturias ha aprobado un decreto que recoge la nueva regulación de las instalaciones juveniles de Asturias y su censo. El texto, publicado en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA) de este lunes, tiene como principal objetivo determinar las condiciones y requisitos que han de cumplir los complejos destinados al público joven, con la finalidad de disponer de un instrumento de información, seguimiento, supervisión de las condiciones de funcionamiento, así como para su inspección y control.
El nuevo reglamento es una extensión de la ley de Participación y Promoción Juvenil, aprobada en 2019, una norma concebida para dotar a las políticas de participación y promoción juvenil del instrumento jurídico adecuado para su desarrollo. En cumplimiento de esta ley, el decreto publicado ahora por el Principado de Asturias determina las condiciones y requisitos que han de cumplir las instalaciones juveniles de la región, estableciendo un marco de control que permita una gestión más efectiva.
Requisitos de las instalaciones juveniles de Asturias
El reglamento reconoce como instalaciones juveniles los campamentos y casas de colonias y establece, en términos globales, una serie de condiciones mínimas en cuanto a servicios y normas de seguridad de los complejos de carácter juvenil, como disponer de un reglamento de régimen interno en el que se regulen las normas de convivencia o contar con un plan de emergencias.
Asimismo, en cuanto a las instalaciones que ofrecen servicio de alojamiento, deben disponer de un libro de registro de los usuarios a su llegada al establecimiento, y en el caso de albergues juveniles de titularidad privada será obligatoria una póliza de seguro de responsabilidad civil por unos límites mínimos de 300.000 euros por víctima y 1.200.000 euros por siniestro. Además, se deben colocar en un lugar visible las listas de precios de alojamiento y de los servicios que no se presten de manera gratuita, así como tener hojas de reclamación a disposición de los usuarios.
En cuanto a su emplazamiento, las instalaciones juveniles deberán respetar el planeamiento, la normativa y las ordenanzas sobre el uso del suelo y la edificación, no pudiendo emplazarse en lugares que puedan suponer peligro para la salud o integridad física.