Tras dos años interrumpida, el Grupo recuperó su tradicional marcha para honrar a la Santina, con especial recuerdo a los fallecidos durante la pandemia
La 28ª edición de la marcha grupista al Santuario de la Virgen estuvo marcada por el recuerdo a los que ya no están. Tras dos años de pandemia, que impidieron la celebración de esta cita siempre tan esperada en el calendario, casi 100 socios del Grupo asistieron hoy a una misa en la Basílica en honor a los fallecidos.
Algunos ya habían empezado el viaje en el día de ayer, a las seis de la mañana, cuando cerca de 41 personas salieron del Grupo para llegar a Cangas de Onís cercanas las diez de la noche. Pudieron disfrutar de un sábado de caminata muy agradable, sin contar con una tormenta repentina a la hora de comer. Otra comitiva de socios salía hoy en autobús para Cangas, donde se reunieron esta mañana con los primeros. El alcalde de Cangas, José Manuel González, recibió a los grupistas y les deseó una buena jornada, mientras actuaba el orfeón y la sección de coros y danzas del club. Durante la misa, oficiada en la Basílica por el abad, se procedió a una entrega floral. Asimismo, las flores presidieron las plegarias a la Virgen dentro de la cueva, siempre acompañadas de música y mucha emoción por parte de los asistentes.