4.000 participantes llenan la ciudad de colorido por una buena causa
Gijón ha vuelto a ser una «gran marea rosa», con más de 4.000 participantes inscritas en la Carrera de la Mujer, que se ha celebrado este domingo, con salida de la avenida de Albert Einstein y llegada a Las Mestas, con un recorrido de cinco kilómetros.
A través de esta prueba se recaudan fondos a favor de la lucha contra el cáncer y otras obras sociales de defensa de los derechos de las mujeres.
En cuanto al ámbito social de la prueba, se ha entregado a la Asociación Española contra el Cáncer la cantidad de 75.000 euros. Se se seguirá apoyando económicamente, asimismo, a tres fundaciones centradas en proteger a las mujeres en distintos ámbitos: Wanawake Mujer, Fundación GEICAM y Clara Campoamor.
Entre las actividades sociales, la asociación ‘Pulseras rosas’ ha estado presente para cortar el pelo a las mujeres que lo deseen para ayudar a quien no tiene recursos para comprar una peluca en su lucha contra el cáncer. El mínimo de la coleta para donar es de 35 centímetros de largo. También ha habido otra iniciativa para donar los cordones de las zapatillas. Por cada metro de cordón donado, se aportará un euro a la Fundación ‘Cris contra el cáncer’. Asimismo, el dinero recaudado con la venta de dorsales solidarios irá destinado a la Fundación ‘Pájaro Azul’, que tiene muchos proyectos de ayuda a la mujer en África. Además, se han podido comprar uno de los 13 modelos de muñecas, en forma de pin y a un precio de 3,5 euros, que están cosidas a mano por mujeres víctimas de trata de explotación sexual y laboral. Se quiere con esta iniciativa dar a esas mujeres una oportunidad laboral.
Otra de las novedades es dar a conocer proyectos solidarios y sociales y apoyando sus causas. En este caso, se ha presentado a ‘Bimenes Apoya’, que acogen mujeres en riesgo de exclusión y a mujeres ucranianas refugiadas. De hecho, 30 mujeres participaron en la carrera, entre refugiadas y anfitrionas de las acogidas.
Desde la organización se ha destacado la importancia de esta prueba en la lucha contra sedentarismo y la obesidad, para lo que volverán las actividades de aeróbic y fitness, así como del cáncer, del que se diagnosticaron en 2020 un total de 34.000 nuevos casos.
Asimismo, en la carrera han participado desde una mujer de 98 años, para lo que se ha creado la categoría de ‘bisabuela’ y una que lleva muchos años ya haciéndolo y es un referente en el deporte asturiano, la alpinista Rosa Fernández, que además es superviviente de cáncer de mama. Esta última ha explicado que tras la prueba se marcha a escalar el K2 en Pakistán, para muchos la más difícil, según ella, además de ser la segunda más alta.