El presidente del Principado, Adrián Barbón, llama a recordar al difunto alcalde de Mieres «en cada corazón, en cada gesto y en cada anécdota; así lo mantendremos vivo en el recuerdo de todos por siempre»
Han sido jornadas de profunda tristeza y de desconcierto, de recuerdos vívidos y de posibles truncados, los que, desde que el domingo se conociese la muerte de Aníbal Vázquez, han marcado el devenir cotidiano en Mieres, el municipio del que el difunto fue alcalde. También han sido días ricos en muestras de pesar y condolencia, de admiración por su persona y obra, de unas virtudes políticas sintetizadas en las tres mayorías absolutas que encadenó durante su trayectoria, iniciada en 2011. Con semejantes antecedentes, era esperable que su funeral, fechado para este martes, se convirtiese en un acontecimiento multitudinario. Y así ha sido. Pese a lo turbio del tiempo, miles de personas, incluido el presidente del Principado, Adrián Barbón, se han concentrado al mediodía de hoy frente al Ayuntamiento del lugar para dedicar un último adiós al regidor
El féretro abandonó la Casa Consistorial, en la que desde el sábado ha permanecido instalada la capilla ardiente, y, escoltado por una guardia de honor de la Policía Local del concejo, ha marchado por la plaza de la Constitución, con paso lento y cadencioso. A su alrededor, en esos primeros instantes, sólo el silencio entre los miles de asistentes, roto de súbito cuando las gaitas comenzaron a entonar el ‘Asturias, patria querida’. Fue entonces cuando los presentes prorrumpieron en un aplauso colectivo, una suerte de salva popular en homenaje al que fue uno de los alcaldes más queridos de España. Al himno regional sucedió el sonido de las sirenas, las mismas que marcaban las horas de entrada y salida de los distintos turnos en los pozos mineros. Un tono escogido como homenaje postrero al que, al margen de su labor sindical y política, fue el pasado profesional de Vázquez.
Ha sido un acontecimiento tan digno del recuerdo como la propia figura del regidor, marcada no sólo por el pesar, sino también por las muchas anécdotas y recuerdos, compartidos por quienes fuesen compañeros suyos en los pozos, en las filas del sindicato Comisiones Obreras y de Izquierda Unida, y en los despachos de los distintos grupos municipales representados en Mieres. Por su parte Adrián Barbón, visiblemente afectado, acompañado por la viceconsejera de Derechos Ciudadanos, Beatriz González, y por el vicealcalde del municipio, Manuel Ángel Álvarez, ha rogado a los presentes, independientemente de su profesión, condición o ideología, a llevar el recuerdo de Vázquez «en cada corazón y en cada gesto y en cada anécdota». Una forma, ha opinado el presidente autonómico en su propia despedida, de «mantenerlo vivo en el recuerdo de todos por siempre».